PARAGUAY. Agricultura familiar campesina en el Paraguay

El actual Gobierno atraves del Gabinete Social y en especial desde el Ministerio de Agricultura y Ganaderia pone énfasis en la atención prioritaria de este sector que es la mas debíl de la población, con los Programas Emblemáticos que se ejecutan actualmente a fin de desarrollar planes que apuntan a una solución de Estado, con políticas públicas sostenible en el tiempo y con proyección de futuro.

“En el Censo 2008, de “Hogares Indígenas”, por ejemplo, se registró a 108.600 personas auto-identificadas como indígenas, teniendo en cuenta la territorialidad y el factor lingüístico–cultural. En base a esta información, en las Instituciones encargadas, como el MAG y otras entidades publicas del area social, se está buscando atender integramente este problema apoyando a las comunidades indígenas en los siguientes aspectos:

Mejorar su capacidad organizativa: Mediante una mayor participación y organización de todo el grupo meta en el aumento de la producción de su tierra.

Inversión: Incrementar el acceso a insumos y recursos básicos que mejoren sus inversiones productivas.

Asistencia técnica: Apoyar mediante técnicos especializados, la producción de rubros de consumo agrícola y de renta, a fin de aumentar la capacidad productiva de los grupos originarios participantes.

En el caso de las comunidades campesinas y pequeños productores rurales, la propuesta de apoyo y participación, es la promoción de la producción y facilitación del comercio para la renta y la seguridad alimentaria de la agricultura familiar. Para la implementación, se debe de lograr la mayor participación de los productores rurales en las actividades políticas y sociales dentro de la sociedad, la mejora de las condiciones de trabajo de los jóvenes del sector, la permanencia de un modelo de producción que permita los ingresos constantes de las familias, y el apoyo de las distintas instituciones a este grupo de riesgo.

Además, se ha previsto considerando las experiencias en otros países que las soluciones tienen que considerar: la ubicación de cada familia grupo o comité, de acuerdo a las circunstancias específicas del territorio, y la coordinación entre instituciones públicas y privadas nacionales e internacionales en el apoyo técnico, financiero y organizacional; que hasta hoy es insuficiente por las limitaciones presupuestarias, financieras y la idiosincrasia del pueblo rural.

Para lo cual se pone atención especial en la propuesta de apoyar el desarrollo y fortalecimiento de la capacidad de organización de las familias, grupos y comités, a fin de dotar a cada participante de un mayor protagonismo dentro de su comunidad.

Lograr que se acceda a una disponibilidad permanente de semilla propia de cada grupo o familia. Y una vez que se haya fortalecido a la población participante apoyar que los mismos puedan adoptar tecnologías propias o apropiadas que les ayuden a lograr cambios en sus sistemas de producción, conservación y comercialización.