La crisis de la Escherichia Coli derrumba los precios en Málaga (España)

La facturación de los productos agrícolas originarios de la provincia de Málaga que se vieron afectados hace meses por la crisis de la bacteria ''E. coli'', tales como el pepino, la patata o el tomate, se ha derrumbado, ya que pese a que la situación se superó, los precios siguen influidos a la baja.

Así lo ha resaltado el presidente de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja) en Málaga, Carlos Blázquez, quien ha explicado que se ha producido una bajada de precios en todos estos productos en torno al 30 por ciento y se ha pasado de facturar 355 millones de euros a 314 millones.

Ha asegurado que, tanto las frutas como las hortalizas, empezaron 2011 con niveles muy buenos pero que, con la crisis del ''E. coli'' y también con la entrada de mercancías de otros países como Marruecos, ha provocado que el consumo continúe, pero a unos precios por debajo de los costes de producción.

Según Blázquez, no hay sector que se salve y que consiga cubrir costes excepto los productos herbáceos, cereales, pero sobre todo, los subtropicales, principalmente el aguacate, donde Málaga presenta la mayor producción a nivel nacional, por lo que lo considera el sector ''estrella'' al que hay que mirar.

En cuanto al olivar, es el tercer año consecutivo que los agricultores pierden dinero, registrando un descenso en la facturación del 28 por ciento motivado principalmente porque ha descendido mucho la producción con respecto a 2010, mientras que las pérdidas en los cítricos se cifran en 30 por ciento.

En cuanto a la ganadería, aunque se observa un pequeño repunte del 4,9 por ciento, los ganaderos aseguran que no es un sector rentable debido a los bajos precios que reciben por sus productos y los altos costes que pagan por los piensos, de forma que la rentabilidad es cada vez menor.

En general, la facturación total agrícola en 2011 ha sido de 471,7 millones de euros un 12 por ciento menos que el año anterior, mientras que la facturación total agraria, la suma de la agrícola y la ganadera, ha sido de 625,4 millones de euros, un 56,4 millones de euros menos que en 2010, lo que supone un 8,27 por ciento menos.

''La climatología ha sido ideal pero el problema ha sido el hundimiento general de los precios'' ha sentenciado Blázquez, quien ha aseverado que pedirá al nuevo ministro de Agricultura una regulación urgente de la cadena de valor para hacer frente a la crisis de precios que padece el campo.

Fuente: Besana Portal Agrario.