La consejera de Agricultura y Ganadería anunció en El Espinar (Segovia) el pago de las ayudas a la modernización de explotaciones agrarias. Unas subvenciones con las que se ha apoyado la renovación y mejora de cerca de 8.000 explotaciones agrarias y ganaderas en los últimos cinco años. En el último ejercicio, el importe asciende a 15 millones de euros que se repartirán entre 587 profesionales del sector en la Comunidad. Este apoyo económico «es una ayuda muy importante para nuestra Comunidad porque permite que las explotaciones sean competitivas y eso quiere decir que tienen la adecuación de medidas necesarias para tener la máxima rentabilidad», destacó Silvia Clemente
La provincia de Castilla y León más beneficiada es Palencia con 123 profesionales del sector que se repartirán 3,7 millones de euros. Le siguen Zamora y León con cifras que rozan los 2,5 millones de euros.
Las líneas de ayuda se traducen en planes para mejorar la eficiencia energética y la reducción de las emisiones de dióxido de carbono, inversiones para el uso más eficiente del agua de riego, para facilitar la instalación de jóvenes agricultores que realicen su primera instalación en una explotación agrícola o ganadera, financiación para la compra de maquinaria y equipos destinados a la prestación de servicios a terceros, para inversiones colectivas o en obras de regadío y equipos de riego.
Diversificar producciones
Los objetivos de esta medida son «la reducción de los costes de producción, la mejora y reorientación de la producción y la mejora de la calidad». Por ello, «la Consejería de Agricultura y Ganadería está apoyando las inversiones en las explotaciones agrícolas y ganaderas, con el objetivo de ordenar y diversificar las producciones en función de las necesidades de mercado, reducir sus costes de producción y mejorar las condiciones de vida y trabajo», recalcó Clemente.
Castilla y León es una Comunidad que «destaca por el apoyo a la modernización de explotaciones», subrayó la consejera. «Es el mejor ejemplo de la pujanza de un sector y de la existencia de una política de desarrollo rural clara por parte de la Junta de Castilla y León», añadió Silvia Clemente.
Modernización de explotaciones agrícolas, destinadas a inversiones mediante planes de mejora, Inversiones para el uso más eficiente del agua de riego, Primera instalación de agricultores jóvenes, Inversiones para prestación de servicio a terceros conforman las líneas de ayudas que van de una cuantía máxima de un 50 por ciento sobre la inversión realizada, en las zonas desfavorecidas, y 40 en el resto.
FUENTE:LA RAZON
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