Si bien faltan pocas semanas para conocer qué volumen finalmente alcanzará la producción agrícola cordobesa en este ciclo 2011/2012, las proyecciones de fuentes confiables indican que será importante el retroceso respecto de la campaña pasada.
La Bolsa de Cereales de Córdoba estima que la producción provincial de maíz caerá un 32 por ciento respecto de la campaña pasada (2,7 millones de toneladas menos) y que la soja también cerrará con balance negativo (un retroceso del 22 por ciento, 2,6 millones de toneladas menos). Estos guarismos se suman a un dato negativo ya conocido: la provincia produjo un millón menos de toneladas de trigo (36 por ciento por debajo de la campaña pasada).
Como este retroceso productivo refleja lo sucedido en promedio, puede deducirse que la campaña será un fracaso económico y financiero de magnitud para aquellos establecimientos agrícolas más afectados por los problemas climáticos de fines de 2011 y comienzos de este año, y dentro de este grupo, para aquellos productores que trabajan sobre campos arrendados, y que manejan márgenes muy reducidos.
Precios. Por fortuna, los precios internacionales de las commodities han recuperado mucho del valor en las últimas semanas. De todos modos, en casi todos los casos, los granos cotizan igual o por debajo de los valores que tenían en similar fecha del año pasado. La soja, cuya cotización estaba en 450 dólares la tonelada hacia fines del 2011, tiene un valor esperado a cosecha (mayo 2012) de entre 510 y 520 dólares la tonelada.
Nótese que el precio de la soja está buscando un nivel atractivo. En particular, el mercado debe convencer a los productores estadounidenses a que se inclinen un poco más por la oleaginosa y un poco menos por el maíz en su campaña 2012/2013.
En los dos meses siguientes se verá si estos priorizan el cereal o la oleaginosa. En caso de que la producción esperada de soja en Estados Unidos no muestre una recuperación importante, y que se confirme el crecimiento esperado en China para lo que resta del año y el 2013, habrá seguramente presión ascendente en los precios internacionales hacia el segundo semestre de 2012. Se tratará de inclinar la producción sudamericana hacia la oleaginosa.
Por el contrario, una gran campaña estadounidense 2012/2013 puede venir acompañada de un amesetamiento o una suave declinación en los precios hacia la segunda parte de este año.
La mejora en los precios internacionales atenuará –pero no compensará– el impacto de la menor producción sobre los ingresos brutos (facturación) de los productores agropecuarios y, por ende, sobre el flujo de ingresos que vuelca el campo sobre el resto de la economía de la provincia.
En estimaciones propias, basadas en el cumplimiento de las proyecciones de producción y en el supuesto de que los precios se mantienen en los niveles que hoy espera el mercado, surge que los productores agrícolas de la provincia verán reducido su ingreso en un 24 por ciento cuando la cuenta se realiza en dólares (1.547 millones de dólares) y en un 17 por ciento cuando la cuenta se realiza en pesos (4.450 millones, a un tipo de cambio de 4,50 pesos por dólar), respecto de la campaña anterior.
Nótese que no se trata de cifras menores: equivalen al 3,3 por ciento del valor de los bienes finales (producto bruto geográfico) que se habrían producido en la provincia durante todo el año 2011, es decir, un PBG estimado en 133.000 millones.
FUENTE: lavoz.com.ar
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