La Mesa de Enlace lanzó un paro en todo el país por siete días a partir de hoy, en rechazo de la reforma impositiva del Gobierno bonaerense de Daniel Scioli y para reclamar cambios en la política agropecuaria nacional, con cuestionamientos al Ministerio de Agricultura de la Nación, que no recibió el pedido de audiencia solicitado por el agro.
Así lo anunciaron los titulares de la Sociedad Rural (SRA), Eduardo Buzzi; Coninagro, Carlos Garetto; Federación Agraria, Eduardo Buzzi; y Confederaciones Rurales, Rubén Ferrero, integrantes de la Mesa de Enlace.
La medida de fuerza, que se suma al paro lanzado por las entidades bonaerenses, comprende el cese de comercialización de granos, animales con destino a faena y productos agropecuarios no perecederos.
“No queremos confrontar, no queremos enfrentarnos a la sociedad, queremos hacer docencia y esclarecer a la gente sobre lo que está pasando”, afirmó Rubén Ferrero, titular de CRA, y puntualizó que en el caso de la comercialización de leche, el productor recibe $1,50 por litro, cuando un año atrás percibía $1,60.
“Queremos que la gente sepa la crítica situación que atraviesa el sector en general”, sostuvo el dirigente, y alertó que “los dos eslabones de la punta de la cadena están perdiendo”.
La Mesa de Enlace se reunió al mediodía en la sede de CRA para debatir la situación que “atraviesa el sector agropecuario” y tras ello anunció el paro cuyos argumentos están contenidos en un meduloso documento.
Los ruralistas señalaron que el sector agropecuario está “colmado de dificultades comerciales y competitivas”, y que “la negativa por parte del Gobierno nacional de recibir al campo” fue uno de los factores que motivó la protesta. Para las entidades, hoy los problemas van desde las trabas en la comercialización, las restricciones para exportar, la destrucción de los mercados y la falta de rentabilidad en algunos sectores como el de la lechería, informaron.
También la “inconsulta” suba en los impuestos inmobiliarios rurales y en la valuación de la tierra, y la suba de los costos del transporte que perjudican principalmente a zonas del Norte argentino.
“En materia agropecuaria, el Gobierno nacional decidió garantizarles ganancias a enormes corporaciones”, indicó el documento .
Antes de anunciar el paro, en la rueda de prensa efectuaron una teleconferencia con federaciones del interior, como el caso de CARTEZ, que agrupa a Córdoba y San Luis, y donde Néstor Roulet, su presidente, describió la caída de la producción, los problemas de los ganaderos y los “impuestos nacionales”, donde van a “tener que pagar un anticipo de ganancia” desmedido. “La Comisión de Enlace de Córdoba pide urgente homologación de emergencia nacional y denuncia los problemas de comercialización del trigo”, dijo.
Martín de Los Ríos, de la Federación de Salta, denunció los problemas de “voracidad fiscal” que afectan especialmente a productores ubicados a 1.600 kilómetros, con economías regionales alejadas de los puertos”.
FUENTE: UNO
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