AGRO20 PERÚ La importancia del crédito en la agricultura

La agricultura peruana tiene un rol prioritario en la alimentación de nuestra población, por lo cual miles de agricultores desempeñan su labor en forma diaria con el fin de ofrecer mejores alimentos. La mayoría de los gobiernos del mundo tienen bancos del Estado que promueven el desarrollo rural, de preferencia la pequeña y mediana empresa, en forma individual o corporativa. Un banco es una institución que promueve los negocios en forma integral, no solo la producción, exportación, etc., sino todo el círculo empresarial.

Por lo tanto, la oportunidad y cantidad de créditos resulta un insumo necesario para afianzar el desarrollo familiar, local y regional. Además, se debe fortalecer otros mecanismos de crédito para la comercialización, infraestructura, industria y exportación, teniendo en cuenta la gran calidad de biodiversidad agrícola agropecuaria que disponemos en la costa, sierra y selva. Ante la situación social del sector agrario se debe tener en cuenta que el Estado ha de contar con una situación financiera de desarrollo suficientemente implementada, con personal calificado, infraestructura y recursos, tanto nacionales como de la banca de desarrollo internacional.

El sistema financiero se robustecería porque ingresarían otros sujetos de crédito. Podrían armarse alianzas estratégicas para atender la demanda del mercado rural, el cual en forma creciente generaría fuentes de trabajo y nuevos productos. El crédito agrario debe tener el planeamiento territorial, determinando el análisis de la potencialidad agrocrediticia en cada zona geográfica que oriente la producción especializada. Los productos bancarios deben ser plenos, como avales, cartas de crédito, fondo de garantía, créditos asociativos y avances en cuentas. Todos a tasas de interés justas, con plazos adecuados a cada calendario de Producción.

Los gobiernos regionales pueden ser pivots de acuerdo entre productores, Agrobanco, empresas comercializadoras directas (Plaza Vea, Metro, Wong, etc.) con la finalidad de fortalecer en cada región la canasta de alimentos de autoconsumo y exportación interregional e internacional. Esta situación amerita fortalecer a los gremios empresariales de la pequeña y mediana empresa y la dación de políticas que afiancen la descentralización, así como ganar la confianza de las nuevas generaciones que podrán contar con un país debidamente alimentado y socialmente justo.

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