La industria neozelandesa del kaki tiene esperanzas de poder exportar en un futuro a los Estados Unidos y China, aunque, como explica Brian Pepper, de First Fresh, no será hasta pasados al menos otro par de años. Señala que los trámites de importación se encuentran en la fase de consulta pública, tras la cual será necesario establecer unas normas para que salga adelante a través de los sistemas legislativos de los países destinatarios en cuestión.
Brian dice que los mercados se sumarían a los países actuales como Tailandia, Malasia, Singapur, Hong Kong, Indonesia, Japón y Taiwán.
"El acceso a los mercados de China y los Estados Unidos ayudaría a reducir la dependencia de la industria en los mercados tradicionales y disiparía el riesgo de efectos adversos en cualquiera de nuestros mercados".
Indica que es probable que los mercados den buena acogida a los kakis, pues ambos destinos confían en la reputación de la fruta por sus beneficios para la salud y disponen de producción de contratemporada propia.
Brian opina que, si dicha exportación se lleva a cabo en un futuro, es probable que esté basada en la calidad y no en la cantidad, pues los exportadores necesitarán garantizarse precios altos para que los envíos a estos destinos sean viables en vista de los requisitos fitosanitarios previstos.
"Es previsible que sea necesaria una comercialización nicho cuidadosa si las empresas comercializadoras de Nueva Zelanda van a obtener buenos precios que recompensen a los productores por el trabajo extra que se necesita para cumplir los protocolos que podrían aprobar ambos países".
Sin embargo, no cree que esto suponga un problema. "La estructura de nuestra industria cuenta con estándares que todos los exportadores deben cumplir como un mínimo. La fruta de calidad es el aspecto diferenciador principal en el que los exportadores neozelandeses confían cuando intentan obtener los beneficios que sus productores necesitan".
A pesar de que dichas exportaciones se basarán en el suministro de una cantidad relativamente reducida de fruta de primera calidad, seguirá existiendo la necesidad de incrementar la producción siempre y cuando otros mercados no fueran a verse perjudicados como consecuencia de ello.
"Las plantaciones recientes y las previstas de kakis Fuyu ayudarán a satisfacer la demanda de fruta neozelandesa en los mercados tradicionales si se permite el acceso".
Actualmente, el volumen de exportación nacional de kakis oscila entre las 280.000 y las 300.000 bandejas de 4 kilos, de las cuales entre el 50 y el 60 por ciento las gestiona First Fresh, que también exporta mandarinas Satsuma, limones Meyer, limones Yen Ben, naranjas Navel y cantidades menores de espárragos, arándanos y kiwiños.
Fuente: Fresh Plaza
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