Durante mucho tiempo se ha intentado comercializar la fruta congelada, la cual nunca ha reunido las cualidades para su consumo directo, sino para pastelería, zumos, compotas, etc.
Cuando se congelan las frutas y hortalizas, el agua contenida en el interior de las células se congela aumentando su volumen, con lo que se rompen las paredes de las células. Al descongelar el agua, ésta se escapa del interior de las células, con lo que la fruta queda sin textura en medio de un charco con los fluidos y sales que contenía, perdiendo su sabor y aroma.
No obstante, tras años de investigación, Cryosalus a patentado un sistema que han llamado Hibernación, basado en principios que regulan el nivel óptimo del agua en las células, para que al congelarse la fruta no se rompan sus paredes, y para que, cuando ésta se descongele, no pierdan sus jugos con sus vitaminas y sales, como sucede en muchos productos congelados convencionales.
“Lo he bautizado con el nombre de hibernación, un término que un informático comprende a la primera. Si dejas hibernar un ordenador, después, éste vuelve exactamente a cómo estaba antes. Lo mismo ocurre con la fruta, cuando esta despierta, se comporta igual que la fruta fresca, con su misma vida útil. Si le llamásemos congelación, la gente lo confundiría con el proceso normal,” explica su inventor, el ingeniero Manuel Bellsolell.
Con este sistema, la fruta puede ser almacenada hasta 2 años sin perder sus propiedades. La fruta hibernada puede almacenarse durante dos años. “Los análisis bacteriológicos de la fruta confirman los mismos niveles de cuando ésta estaba fresca,” añade.
Esta nueva solución ofrece múltiples ventajas y soluciones de acuerdo con Manuel Belsolell. “Imaginad en el campo, la de toneladas de fruta que se pierden, en el campo, transporte, distribución. La hibernación solucionaría el gran problema de las mermas, evitando que la fruta se estropee o se pierda por el camino. Incluso se podría almacenar la fruta para venderla en el período comercial más interesante en precios,” afirma.
En cuanto a sus canales de venta, Manuel explica que el retail sería todavía difícil, teniendo en cuenta que es una empresa joven y pequeña. “Para los supermercados deberíamos invertir un dinero para grandes campañas que por ahora no disponemos. Nosotros utilizamos el canal Horeca en restaurantes y catering. Estamos en contacto con cocineros para que nos expresen sus necesidades, quienes buscan adquirir postres terminados, como nuestras brochetas de fruta y exquisitos bombones rellenos de fruta congelada. Los bombones son divertidos porque nunca sabes el sabor que te va a tocar, una vez puede ser plátano, otra naranja o fresa fresca…¡Causaron sensación entre los visitantes en las ferias de Gourmet y Alimentaria!”
Por otra parte, “creemos productos pueden encontrar más espacio en mercados del Norte de Europa, como los países escandinavos, donde no pueden gozar de fruta tan fresca como la que tenemos en un país productor de fruta como España. Para exportar la fruta a destinos lejanos es necesario cortarla verde para que vaya madurando durante el trayecto. Pero gracias a la hibernación, la fruta puede cosecharse en su momento óptimo de maduración natural.”
FreshPlaza ha podido comprobar como, después de descongelar, o mejor dicho, “despertar” a la fruta, ésta conserva asombrosamente su aroma, textura y sabor. Si nadie te dice que la piña ha estado hibernada, pensarías que está recién comprada en la frutería.
Contacto:
Cryosalus System S. L.
Manuel Bellsolell, Dr. Ingeniero
Calle Vallerona, 6, bajos
08950 Esplugues (Barcelona – España)
m.bellsolell@cryosalus.com
Tel. (34) 677454623
www.cryosalus.com
Fecha de publicación: 26/06/2013
Editor: Joel Pitarch Diago
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