Los pimientos italianos están disponibles en los supermercados casi todo el año, pero incluso garantizando la producción, hay algunos períodos durante los cuales se reduce al mínimo debido al clima.
Giovanni Antonio Orioli, Especialista de Ventas de Pimientos para la multinacional de semillas Nunhems, explica que "sobre todo, debemos distinguir entre las producciones en invernadero y a campo abierto. Respecto a esta última, la cosecha comienza a principios de agosto y, si el clima lo permite, está disponible hasta noviembre. Entonces llegan productos procedentes de invernaderos en el Sur y en Sicilia."
"Durante el tiempo de producción a campo abierto también se pueden encontrar productos de invernadero de Campania y el Norte-Centro, que están disponibles en junio-julio. En otras áreas, se llevan a cabo trasplantes finales de invernadero, así como ocurre en julio, en el plano Metapontino, cuando el producto aún está disponible. También hay zonas, como Sicilia, donde las plantas se siembran en otoño y se cosechan en primavera.
"La producción de pimientos se concentra principalmente en las regiones del sur, especialmente en Sicilia y Puglia, seguido de Campania y Lazio, pero se produce también en otras regiones como: Calabria (a campo abierto), Véneto y Piamonte (invernadero), Cerdeña y Umbría (a campo abierto), aunque sólo de forma limitada.
"Siempre es difícil hacer una estimación sobre los volúmenes, pero en general estamos hablando de alrededor de 400.000 toneladas por año. Creo que, a pesar de no tener aún una imagen definitiva de la temporada actual, este año, la producción debería ser menor. Esta disminución ya se ha registrado en los cultivos de invernadero".
Respecto a las exportaciones, Orioli señala que "hay que decir que Italia es un país de venta a nivel nacional y la mayor parte de la producción, especialmente a campo abierto, está destinada al procesamiento. Las empresas venden productos procesados, especialmente los pimientos a la brasa, bajo su propia marca a cadenas y empresas de cátering. Además, Italia realmente importa más. Antes de la crisis y los problemas técnicos y comerciales, solíamos ser fundamentalmente exportadores y había más áreas cultivadas. Si se habla de exportaciones son de productos procesados y se destinan a países del norte de Europa.”
"Lo positivo es que debido a la versatilidad de los pimientos, el consumo de productos frescos y procesados se ha incrementado y las superficies cultivadas se mantienen más o menos constantes. Por lo general, los productores de pimientos en Italia son profesionales que cultivan cada año".
Como la mayor parte de la producción se destina a la transformación, los italianos están recurriendo a los productos preparados o semi-preparados, lo que significa que se alimentan principalmente de IQF de productos listos para comer. "Los italianos prefieren la variedad Lamuyo, aunque también hay algunas zonas que prefieren Corno di Toro, friariello, torpedo y otros tipos de pimientos."
Problemas culturales y fitopatológicos de los pimientos en Italia
"Hay muchos problemas fitosanitarios a pesar de que, gracias a la introducción de los híbridos, las nuevas variedades disponibles nos permiten controlar estos patógenos, sobre todo los virus como la transmitida por Thripidae, el vector del Tospovirus. Se presenta otro problema por el CMV (Cucumber Mosaic Virus), que se transmite por los áfidos, pero ya los hemos controlado, gracias a los híbridos con resistencia intermedia."
En cuanto a las expectativas de futuro se refiere, la esperanza es que la especie siga creciendo. "Es lo que todos esperamos, porque el interés de los consumidores ha cambiado gracias a la gran versatilidad del producto. Además, los productores de invernadero y a campo abierto se han especializado cada vez más. Gracias a la introducción de técnicas innovadoras se puede producir más y por más tiempo. De todos modos, ambos tipos de cultivos han mejorado la calidad y la salud de los frutos.
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