AGRO20 ITALIA: "Deseamos introducir tomates en Italia además de en Holanda"

La sociedad agrícola Orto Serre está especializada en el cultivo de tomates cherry para su cosecha en racimos desde 1999. Ubicada en San Nicola di Melfi (Basilicata), la finca ocupa más de 60.000 metros cuadrados, 30.000 metros cuadrados de los cuales están protegidos.

Orto Serre utiliza una tecnología hidropónica sin tierra y el cultivo se lleva a cabo en un sustrato alternativo hecho de lana mineral.

Actualmente, el ciclo de producción de tomates cherry comienza en marzo con los trasplantes, y la cosecha empieza 60 días después y se realiza cada semana hasta la temporada de invierno.

El ciclo de producción se gestiona siguiendo unos criterios de control biológico integrado, y la polinización es natural, con colmenas de abejorros que mejoran la calidad y la autenticidad de los frutos. De hecho, los tomates polinizados por abejorros no se tratan con hormonas y pueden reconocerse fácilmente por las semillas.

Orto Serre, que recibió la certificación GlobalGAP en 2003, depende de una sola variedad de tomate cherry de alta calidad: la Juanita F1 de De Ruiter-Monsanto. Como dice el propietario Antonio Della Spina (abajo en la foto), que dirige la finca junto con su hermano Giuseppe: "En la actualidad somos los principales productores de esta variedad en Italia con 100.000 plantas al año. Realizamos los trasplantes de los portainjertos Maxifor el 15 de marzo y la producción durará hasta mediados de noviembre.

Un mercado de alta gama
La totalidad de la producción, que está destinada a un mercado de alta gama, la compra actualmente un especialista holandés que vende tomates cherry durante todo el año gracias al producto de Orto Serre y otros dos agricultores de España y los Países Bajos.

"Suministramos racimos de tomates en cajas listas para el transporte; después, el cliente los coloca en envases de lujo para venderlos a precios muy elevados. ¡Y la gente los compra! Lo cierto es que la Juanita es una de las mejores variedades de tomate cherry que he cultivado nunca: ¡son agradables a la vista y tienen un sabor excepcional!".

Son de color rojo vivo, con calibres de entre 28 y 32 milímetros y una encantadora forma de corazón. Una calidad superior para la que, sin embargo, parece no haber compradores en Italia. "A mí me gustaría colaborar con alguien que, desde junio a octubre, estuviera interesado en tomates de alta calidad. Podemos producir entre 550 y 600 toneladas al año".

Antonio es consciente de que el precio del producto podría ser un obstáculo: "Me pongo en la piel de los compradores y me pregunto si vale la pena comprar un producto más barato y después quedarme con producto sin vender, por tanto, costos finales más elevados; o si es mejor ir a lo seguro con un producto que guste a los consumidores. Me refiero en particular a los que nos aconsejan cultivar productos de alta calidad. Lo hacemos, pero los únicos que sacan ventaja de ello son los mercados extranjeros".

Fuente: Fresh Plaza

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