Con la primavera llega a las huertas riojanas su momento de máximo esplendor. Una explosión vegetal que se traduce en alcachofas, espárragos, pimientos, guisantes, judías verdes, patatas, puerros… e incluso las últimas coliflores invernales. Cuando se valora más que nunca el producto, poco hay como este. Y dentro de La Rioja tal vez sea Calahorra la ciudad que concentra mayor riqueza hortícola. Por eso, cada mes de abril se celebran en esta localidad las Jornadas Gastronómicas de la Verdura, que este año, en su XVII edición, tendrán lugar entre el 22 y el 28 de abril.
Estas Jornadas, organizadas por el Ayuntamiento de la bimilenaria ciudad con la colaboración del Gobierno y la Cámara de Comercio riojanos y los restaurantes, agricultores y bodegas calagurritanos, se han convertido en una de las grandes fiestas gastronómicas de España y una buena forma de descubrir las excelencias de la huerta local. El eje central es un gran mercado de la verdura, instalado en la carpa del Silo, en el que se exponen y se pueden adquirir todos esos magníficos productos. En torno a él, degustaciones y catas de vino y aceite, charlas y coloquios a cargo de destacados cocineros y la posibilidad de disfrutar de menús especiales en una decena de restaurantes y tres bodegas, y de pinchos y tapas en más de veinte bares de la localidad siempre con la verdura como principal ingrediente.
Tanto si se acercan a Calahorra durante estas jornadas, como si lo hacen en cualquier otra época del año, no dejen de comer en Chef Nino, uno de los restaurantes más tradicionales de la ciudad. Situado en el centro mismo, a escasos metros del Ayuntamiento, Ventura Martínez trata las verduras como pocos en la localidad. Cocina de producto pero bien aligerada y puesta al día. Excepcional, sobre todo, la menestra. Y la tortilla de borrajas con ajos frescos a la plancha. Para completar el menú, sus croquetas de cordero (que no llevan bechamel), las costillitas de cordero lechal, el cabrito asado o el cochinillo en dos degustaciones. Más sencillo, pero igualmente recomendable, Casa Mateo, donde también la menestra es de primera, lo mismo que las patitas de cordero o el timbal de huevo, pimientos y morcilla. Otra dirección muy fiable es La Taberna de la Cuarta Esquina, un clásico de la ciudad que tiene a la huerta ribereña como eje principal de su oferta gastronómica. Los espárragos frescos templados, las alcachofas, las crepes rellenas de verdura… Buen sitio para probar el cordero asado a la camerana, rehogado antes de asar para que resulte más jugoso. Tiene además una de las mejores bodegas de la zona. Recomendables también las verduras frescas de La Rana del Moral, que pueden completarse con un asado y postres caseros. Si en vez de una comida formal, prefieren los pinchos, los mejores los encontrarán en las barras de La Pedrera, muchos de ellos con verduras, y del Bar Café Rioja.
fuente abc
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