La consejera de Agricultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, María Luisa Soriano, ha señalado que el cultivo de cereal puede ser el que se vea más afectado por las intensas lluvias registradas en las últimas semanas, aunque ha opinado que todavía es prematuro hacer una valoración de daños. En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Gobierno, Soriano ha informado de que los técnicos de la Consejería están valorando la situación de algunas parcelas donde ha habido un encharcamiento prolongado, si bien ha considerado que aún no se puede hacer un cálculo de daños porque todavía está lloviendo. Aún así, ha apuntado que el cultivo más afectado por las lluvias en la región puede ser el cereal. En cualquier caso, ha recordado que el Gobierno regional y también el central tiene habilitadas ayudas para los agricultores y ganaderos, destinadas a financiar seguros agrícolas.
"El Gobierno regional está, desde el primer momento, concienciado con ayudar a los agricultores y ganaderos para asegurar las rentas", ha recalcado Soriano, que ha señalado que las ayudas públicas pueden llegar a cubrir hasta el 50 por ciento de la póliza del seguro agrario.
De este modo, ha destacado que el Gobierno regional, para este año 2013, no sólo no ha mantenido, sino que incluso ha aumentado las ayudas para estos seguros agrarios, frente a otras comunidades que "han suprimido estas ayudas".
Por su parte, La Junta de Castilla y León esperará a contar con una estimación oficial de las pérdidas agrícolas causadas por las inundaciones de los últimos días para respaldar las posibles peticiones de declaración de zona catastrófica que puedan solicitar a alguno de los municipios afectados.
El portavoz del Ejecutivo autonómico, José Antonio de Santiago-Juárez, ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno que por el momento no pueden posicionarse hasta conocer una cuantificación de daños, aunque ha avanzado de que producirse pérdidas elevadas "siempre" apoyarían la petición de los municipios.
La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) calcula que las inundaciones de los últimos días han dañado unas 150.000 hectáreas de cultivo en la cuenca del Duero, para la que piden la declaración de zona catastrófica.
El coordinador de la organización, Jesús Manuel González Palacín, ha reconocido que será necesario que se realice una evaluación de los daños oficial, aunque ha avanzado que según sus cálculos oscilarán entre los cincuenta y los setenta millones de euros de pérdidas.
fuente agroinformacion
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