AGRO20 ESPAÑA El vino de 2012 es calificado de «excelente» por los expertos

La nota final máxima dada a la añada de 2012 fue fruto de una revisión hecha por nueve catadores, quienes a ciegas probaron una docena de blancos, en varias variedades; dos pares de tintos y un par de rosados. Es la cuarta vez en la historia del Consejo Regulador de Vinos de Lanzarote que se da la máxima calificación.

En versión del presidente de la entidad, Javier Betancort, la nota supone «un dato fantástico», al permitir dar realce a un producto que lleva años con una demanda que supera a la oferta. En especial hay que destacar que  siguen ganando protagonismo las ventas fuera del territorio insular. Este año se confía en mantener el ritmo de salida del producto que ya hubo en 2012, periodo en que el 51% del vino de Lanzarote se colocó en otros puntos de Canarias, en Península y en el extranjero. Varía este panorama con respecto a 2009, cuando fuera de la Isla se colocó solamente el 32% de toda la producción, con el añadido de que hace unos años los caldos locales se vendían a precios inferiores a los actuales. 

Atendiendo a la demanda  y a la uva recolectada el pasado verano, durante este año se prevé que  se envasen al menos 1,7 millones de botellas, con predominio de los caldos blancos. De media se prevé que cada botella salga por unos 7 euros, con lo que las bodegas tendrán cierto beneficio, se  dio a entender en el acto de ayer tarde, para mantener la tendencia a pagar más por las uvas. 

Para la próxima campaña se tiene intención de mantener, como poco, el nivel de precios de la vendimia de 2012. Es decir, de media se abonarán 1,6 euros por cada kilo de uva malvasía; mientras que para el resto de variedades se pagarán 1 ,4 euros el kilo. Es decir, muy por encima de lo que se actuaba en las campañas de finales de la pasada década, cuando rara vez se pasó del euros por cada kilo de fruta.

Con estos precios, no obstante, se seguirá manteniendo el riesgo de abandono de cultivos que amenaza al sector desde hace años, por la sencilla razón, manifestó Javier Betancort en su contundente discurso, de que «la viña en Lanzarote no es rentable; y si no es rentable se abandona». Como solución, al margen de plantear una amarga queja sobre cómo trata el Gobierno de Canarias al sector, expuso el presidente del Consejo Regulador la necesidad de llegar a largo plazo a poder vender cada botella a unos 10 euros, al ser considerado el vino como producto de alta gama. Se permitirían así pagos de 3 a 4 euros por kilo de uva.

Por último, se aprovechó el acto para ratificarse el avance hecho a comienzos de mes por CANARIAS7 sobre cómo será la cosecha venidera. Al menos se recogerán de 2 a 2,5 millones de kilos de fruta, salvo daños causados por una ola de calor. De este modo, más o menos se cubrirán las necesidades de las bodegas para seguir cubriendo la demanda general del producto.

fuente canarias7