El programa para la renovación e incremento de las producciones de cítricos en Cuba incluye el fomento de nuevas áreas, las cuales se encuentran libres de la plaga del Dragón Amarillo, principal afección del cultivo.
La estrategia prevé la ubicación de plantíos en terrenos alejados de sitos en los cuales está presente esta enfermedad, oriunda de Asia, la cual devastó gran parte de las zonas dedicadas a esta actividad en el país, aseveró a la AIN Raisa Llauger, directora del Instituto de Investigaciones de Fruticultura Tropical.
Señaló que las posturas empleadas en estos lugares de desarrollo proceden de viveros de alta tecnología.
Llauger destacó la introducción de novedosas variedades de frutales y mejoramiento de los existentes, con vistas a garantizar la exportación y el mercado nacional.
Una de las entidades con destacada labor en el 2012 fue la Empresa de Cítricos Arimao, de Cienfuegos, la cual sembró 120 hectáreas de esta fruta.
Arnaldo Pérez Morales, su director, comentó a la prensa que la tecnología empleada posibilita intercalar naranja con otros frutales, como la guayaba y el mango, lo cual eleva los rendimientos y permite aprovechar mejor los recursos y la tierra.
Las inversiones previstas se utilizarán para establecer un programa basado en el incremento de la productividad a través de una mayor densidad de plantas por hectárea.
Gracias al esfuerzo de los fruticultores estatales y la rama campesina hubo mejor abastecimiento a los mercados, la industria y el turismo en 2012, pero todavía es insuficiente para cubrir la demanda.
Fuente: Freshplaza
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