El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), Patricio Crespo, condenó el paro portuario que se vive en el país, y que ya suma 18 días, y llamó a las autoridades de Gobierno a aplicar el artículo 11 de la Ley de Seguridad del Estado a fin de restituir el libre tránsito de mercancías en los terminales.
Esto, considerando que la paralización de los puertos ha provocado un grave daño al sector exportador, especialmente a los productores frutícolas, quienes en pleno periodo de cosecha no han logrado exportar la totalidad de los contenedores destinados al mercado internacional. “Esta situación atenta contra el prestigio que se han ganado nuestros exportadores frutícolas, por la calidad de sus productos y el cumplimiento responsable de los plazos de envío”, señaló el timonel de la SNA, Patricio Crespo. “Esperamos que este conflicto llegue a una pronta solución a fin de evitar perjuicios mayores para el sector agroexportador”, agregó el líder gremial.
Sobretasa al maíz
Crespo también se refirió a la sobretasa de 10,8% aplicada al maíz partido argentino, la que calificó como “una importante señal en defensa de la libre competencia, que restablecerá la fluidez del mercado del maíz”.
El presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura valoró la decisión de la Comisión Nacional de Distorsiones de Precios de recomendar una sobretasa al ingreso de maíz partido subsidiado desde Argentina, en una medida antidumping que la SNA venía solicitando desde octubre del año pasado, para corregir la distorsión que provoca el ingreso de maíz partido trasandino a un precio subsidiado. Todo esto, producto de las políticas comerciales que aplica el vecino país para controlar los precios internos y las exportaciones.
El timonel de la SNA destacó que esta sobretasa resuelve el tema de fondo, el dumping argentino, y alivia la situación de más de 17 mil pequeños y medianos productores que sólo en 2012 -y en ausencia de una sobretasa- perdieron $18.597 millones (aproximadamente US$ 40 millones) por concepto de menores ingresos. En lo inmediato, Crespo agregó que esta determinación destrabará el inicio de la comercialización de las cosechas, inmovilizada ante la falta de señales de precios y definiciones de la Comisión Nacional de Distorsiones.
La ventaja artificial de los productos argentinos se logra mediante dos vías. Primero, a través de la aplicación de impuestos diferenciados a las exportaciones, que corresponden a un 20% en caso de maíz grano y un 11,6% al maíz partido. De este modo, el grano “elaborado” (maíz partido) goza de una ventaja para la exportación correspondiente a un diferencial de 8,4%. Esto es 11,6% en lugar de 20%, lo que incentiva a exportarlo partido para ahorrarse ese diferencial.
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