AGRO20 Bolivia: Gobierno se reunirá el viernes con los panificadores.

El Gobierno central, a través del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, trabaja en la implementación de más mecanismos para el sector panificador, que en la actualidad recibe harina subvencionada por el Estado, con la finalidad de mantener el precio del pan de batalla en 0,40 bolivianos la unidad.

La información corresponde a la ministra de Desarrollo Productivo y Economía Plural, Teresa Morales, quien anunció que este viernes se reúne con el sector para analizar sus demandas, cuyo resultado puede concluir en la firma de un convenio que mantenga el actual precio de la unidad de pan de batalla.

En días pasados, los panificadores rechazaron el Decreto Supremo N° 1444, que garantiza la subvención a la harina de trigo distribuida al sector panificador a precios preferenciales y, por el contrario, advirtieron que elevarán el precio del pan a 0,53 centavos de boliviano, porque así lo establece su hoja de costos.

Los panificadores no sólo se benefician con la harina distribuida por el Gobierno, sino con la manteca y el azúcar para elaborar el pan de batalla.

Anualmente, los propietarios de hornos de panificación se benefician con alrededor de 1,7 millones de quintales de harina subvencionada.

"El sector panificador recibe una subvención de un millón 700 mil quintales al año. Cuando en el mercado está en 210 bolivianos el quintal a ellos se les entrega en 145", informó la ministra de Desarrollo Productivo y Economía Plural.

El apoyo gubernamental también logró que los panificadores se beneficien con la caja de manteca de 17 kilos por el precio preferencial de 198 bolivianos, cuando en el mercado interno es de 228 bolivianos.

Entre las políticas de apoyo a los panificadores que el Gobierno considera está la conexión de gas natural a las panaderías, puesto que el Gobierno estima que una vez accedan al energético, les significará una reducción del 50 por ciento en ese ítem.

"Estamos trabajando con YPFB, y el Ministerio de Hidrocarburos, con el objetivo de reducir a la mitad el costo energético que tienen los panificadores y que esto compense la subida del costo de vida que ellos señalan para incrementar el precio del pan", explicó Morales.

A esto se deben sumar las mejoras en el control de la calidad de la harina subvencionada que reciben los productores, al igual que la importación directa, esto con el propósito que los panificadores dejen de internar el producto mediante terceros. Al respecto, el Gobierno central recuerda que está vigente la importación de harina con "arancel cero".

Los panificadores pidieron al Ejecutivo reducir en 20 bolivianos el precio de entrega del quintal de harina subvencionada, es decir de 145 bolivianos a 125 bolivianos, cuando su valor en el mercado nacional —sin subsidio— se encuentra en alrededor de los 200 bolivianos.

"Ellos han sugerido bajar en 20 bolivianos la entrega de la harina subvencionada, estamos trabajando con ellos para verificar técnicamente si esto puede ser posible", afirmó Morales.

Subvención

Según el Gobierno, los panificadores no sólo reciben harina subvencionada por el Estado, sino también otros productos como el azúcar y la manteca, que reciben a precio promocional.

Respecto de la distribución de manteca, la ministra Morales indicó que los productores de pan solicitaron que se les entregue el insumo en envases de lata porque éstos pueden ser reciclados para su posterior uso en la elaboración del pan de batalla.

"También estamos trabajando en esto, para ver si se puede entregar manteca en latas, de tal manera que el costo en latas se optimice para ellos", remarcó.

De acuerdo con la Ministra de Desarrollo Productivo, la demanda de incrementar el precio del pan sólo se registra en las ciudades de La Paz y El Alto, y no así en otras regiones del país.

"La Federación de Santa Cruz, y entiendo que otras del interior del país, ratificaron que no van a subir el precio del pan de batalla", manifestó Morales.

Fuente: Los Tiempos