Sobre la base de datos reportados, los profesionales del Servicio contactaron al propietario del predio con quien llegaron hasta el lugar donde estaban instaladas las colmenas denunciadas. Allí constataron signos clínicos compatibles con la enfermedad, por lo que tomaron muestras e inmovilizaron el colmenar hasta recibir el resultado de los análisis de laboratorio.
Las muestras, analizadas en el Laboratorio del Senasa mediante la técnica de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR), confirmaron el diagnóstico positivo a “Loque americana” por lo que los agentes del Senasa, acompañados por el propietario de las colmenas, revisaron y sanearon el colmenar afectado, así como otros cercanos que presentaban signos compatibles con la enfermedad.
Asimismo, alrededor de cada foco, los agentes del Senasa trazaron superficies perifocales de 1,5km de radio, a fin de inspeccionar los colmenares presentes y verificar la extensión de los casos constatados. Esto involucró la inspección de aproximadamente 600 colonias, entre núcleos y colmenas, de las cuales 12 fueron saneadas por incineración, método elegido por su propietario.
El proceso de inspección y control sanitario finalizará con el seguimiento del estado sanitario de las colmenas en su lugar de origen, a cuyo cargo se encuentra la oficina del Senasa correspondiente al lugar.
Cabe destacar el apoyo y colaboración del propietario de las colmenas con los agentes del Senasa durante las inspecciones y las acciones de saneamiento, que permitieron controlar la posible propagación de la enfermedad entre sus propias colmenas y las de los apiarios circundantes.
El Programa de Sanidad Apícola del Senasa recuerda a los productores apícolas que el registro de sus apiarios en el Renspa y la denuncia de casos y sospechas de enfermedad, en la oficina del Senasa correspondiente, resultan indispensables para disminuir la incidencia y dispersión de patologías apícolas.
Fuente: Agromeat
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