AGRO20 ARGENTINA: Los ladrillos ya no son un poroto

–Hoy me puse el traje de economista y si usted no se ofende, compañero don Productivo, le voy a hablar de precios relativos. Y antes de que me pregunte qué significa eso en la jerga económica, le señalo que se trata de cuánto vale una mercadería en relación con otras.

–Está bien, si viene con aires de académico, camarada don Tecnológico, espero que su disertación al menos sirva para sacar alguna conclusión y podamos enriquecer y hacer amena a esta ronda de mates de los viernes.

–Vamos al grano, entonces, mi amigo. Un camión de soja valuado a los precios internos compra actualmente una cantidad de metros cuadrados de construcción bastante similar a la de comienzos de la década del 2000, según unos cálculos que hizo en este caso un economista de verdad, Juan Manuel Garzón, del Ieral-Fundación Mediterránea. Esto no tiene que ver con alguna circunstancia adversa asociada a los precios internacionales. Por el contrario, el precio promedio de exportación de la soja de 2012 fue 3,3 veces superior al precio promedio de exportación del 2001 (561 dólares la tonelada versus 172 dólares la tonelada).

–¿Cómo se explica entonces que, con tanta diferencia de “verdes” para la soja, se compre más o menos la misma cantidad de ladrillos?

–El retorno a los niveles observados en momentos críticos de la economía argentina y de muchos productores agrícolas del país se explica, según Garzón, por lo siguiente: a) elevados impuestos (35 por ciento derechos de exportación); b) una inflación doméstica en bienes construcción excepcionalmente alta (promedia el 25 por ciento anual entre 2009 y 2012); c) un tipo de cambio que en los últimos años ha copiado sólo un tercio de esta inflación.

–No sólo los salarios pierden ante la inflación…

–Una estimación de Garzón indica que el poder de compra interno de un camión de soja puede quedar en 12,4 metros cuadrados en este 2013, un 11 por ciento por debajo del nivel de 2012 y un 29 por ciento por debajo del promedio de los últimos 21 años. Se requiere que la producción de soja de este año crezca al menos en cinco millones de toneladas para que la campaña 2012/2013 tenga un poder de compra en bienes construcción similar a la de 2011/2012.