…que, el clima alarma especialmente a los productores y no sólo por las lluvias que pueden complicar la recolección (se sabe que especialmente la soja, si no es cosechada a tiempo, se desgrana en el campo), hecho que se ve agravado por la muy mala situación de los caminos rurales que casi en ningún caso se arreglaron después de las lluvias de primavera y que ahora impedirían salir con los camiones cargados de los campos, si no también por el peligro de heladas tempranas que podrían quemar hasta los campos naturales, achicando sensiblemente la receptividad de los potreros.
…que el “efecto papal” parece que alcanzó a una de las entidades madres del sector: la Sociedad Rural Argentina. Es que por orden de sus directivos se habría suspendido el vino en los almuerzos previos a las reuniones de Comisión Directiva. Para algunos, bastante más prosaicos, la decisión se debió más al hecho del “sopor” en el que entraban algunos de los miembros del cónclave, que a un refortalecimiento de los poderes del ayuno y la abstinencia… Pero también otros acontecimientos están pasando inadvertidos, tal el caso de las terribles diferencias en el seno de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) que preside Cristian Amuchástegui, y que ya forzaron la renuncia de dos de sus pilares: Rodriguez Ansaldi y Angeli. Otro tema que pasó también a segundo o tercer plano fue el de la deuda y el arreglo con los holdsout que, según algunos analistas, podría provocar bajas adicionales en los precios agrícolas de los productos argentinos. El asunto es seguido de cerca por las entidades comerciales del sector. Es que se estima que, de no haber un acuerdo satisfactorio, la Argentina podría perder líneas de crédito internacionales que se aplican para la compra de este rubro.
…que cada vez son mayores las diferencias en los precios y los costos de Argentina respecto de sus principales vecinos, tema que también favorecería cierta “irregularidad” alrededor de la frontera. Por caso, productores arroceros señalan que en Brasil la tonelada de arroz se paga el doble que en la Argentina (debido al nivel del tipo de cambio + las retenciones). Sin embargo, los costos de los insumos, como el encalado, para corregir la acidez de los suelos, sale la mitad que en Misiones. Otro tema es el precio de la soja en Paraguay o en Bolivia (alrededor de $ 4.000), respecto de la Argentina donde los productores reciben menos de la mitad. Lo mismo ocurre con otros granos, o productos tipo la harina de trigo, etc. Semejantes diferencias están determinando también que muchos productores comiencen a achicar sus proyecciones para la campaña que se debe iniciar en pocas semanas más y también en materia ganadera donde el fuerte aumento de los costos y la erosión que la inflación determina en los precios de venta de la hacienda, determinan que, para muchos, hoy la situación sea muy similar a la que se vivía en 2007 y es lo que justificaría el nuevo aumento que está registrando la participación de las hembras en la faena, indicador claro de que se habría terminado (antes de tiempo) el ciclo correspondientede a la retención y recuperación del rodeo.
¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!
Participar en AGRO 2.0