Los negocios de carne bovina de Uruguay que se llevan a cabo en el marco de la cuota 481 reflejan que el país se ha ganado otra cuota Hilton, si se considera que al cierre del ejercicio agrícola 2012/2013 la primera opción representará alrededor de 6.600 toneladas peso embarque, frente a las 6.300 de la segunda y tradicional alternativa que tiene la industria ganadera uruguaya.
Como se recordará las ventas de la cuota 481 que se promueven en Europa y que manejan los importadores están exoneradas de aranceles y corresponden a cortes de alta calidad, sumado a que se puede alcanzar mayor cantidad de cortes por animal que con la Hilton.
La carne se debe producir de animales que deben ingresar a los corrales con 23 meses de edad y que en sus últimos 100 días deberán ser terminados a granos.
Estas características sumadas a los atractivos precios que se manejan, entre 10% y 15% por encima del mercado, han generado una gran inquietud a nivel de todos los operadores vinculados a esta actividad, desde los productores criadores, recriadores, concentraciones de corrales y frigoríficos, interesados en este tipo de negocios.
Al 10 de enero, los negocios que se habían cumplido dentro del actual año agrícola registraban un valor promedio de US$ 9.180 la tonelada, según la publicación Tardáguila Agromercados, lo que marca uno de los aspectos de interés para encarar este tipo de producciones.
Los negocios se cumplen a razón de la colocación de unas 550 toneladas mensuales, lo que representará aproximadamente unas 6.600 toneladas al cerrar el ejercicio 2012/2013 en el próximo mes de junio, destacó a El Observador Agropecuario el director de Control de Calidad del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Ricardo Robaina.
Resaltó la inquietud demostrada por los productores por conocer la forma de encarar este tipo de producciones, especialmente en jornadas promovidas por el Instituto Plan Agropecuario (IPA) en distintos puntos del país.
En ese marco se informó sobre los orígenes de este negocio generado en Europa y al que accedió Uruguay, junto a Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda. A su vez, los técnicos del IPA se refirieron a los aspectos productivos, los números de la cría, recría y terminación de los ganados a corral, así como también la visión de la industria a cargo de un representante del sector.
Robaina opinó que ha sido muy positiva la dinámica que se ha promovido sobre la cuota 481, si se tiene en cuenta que a 33 años de que Uruguay lograra la cuota Hilton todavía existe desconocimiento acerca de ese tipo de negocios que involucra cortes de alta calidad y de mayor valorización en el mercado mundial.
Destacó también el involucramiento de todos los actores, por ejemplo los criadores e invernadores, porque se necesita un buen ternero, bien alimentado desde su nacimiento, para poder llevarlo luego al corral y que tenga buenos rendimientos industriales para cumplir con las especificaciones.
Resaltó además las fortalezas de “empezar a ejercitarnos en el trabajo conjunto de todos los actores del negocio, porque el frigorífico tiene que acordar la compra con un corral de engorde que le suministre los animales, porque de lo contrario no puede salir a comprometer la venta. A su vez el corral necesita también tener armado el negocio con el productor que le va a proveer los terneros para cumplir con el frigorífico. Por lo tanto, lo que hace este negocio es ejercitarnos en un trabajo integrado y con mayor seguridad, que permite que el criador tenga seguridad de venta de sus terneros y el corral tenga la certeza de colocación y de conocimiento del precio que le pagará el frigorífico por lo menos con 100 días de anticipación”.l
Cada vez se encierra más ganado
lll “El engorde a corral con vistas a la cuota 481 se cumple a pleno y ha cambiado la perspectiva del negocio ganadero. Cada vez se encierra más ganado con destino a ese negocio”, reveló a El Observador Agropecuario Martín Martinicorena, uno de los responsables del corral de engorde Il Tramonto, ubicado en Soriano.
En ese lugar, que trabaja prácticamente con su capacidad colmada para unos 14.000 novillos, un 40% de la concentración pertenece a novillos que tienen ese mercado y que, desde la recría, tienen un valor diferencial en el precio por encima de los restantes animales que son encerrados, dijo el empresario. Martinicorena explicó que cada día hay más ganados que llegan con los kilos requeridos para ingresar al encierro, lo que demuestra que el productor los prepara con ese destino, al que tienen que ingresar con 23 meses de edad y salen del encierro con 27.
Los animales entran con unos 350 kilos y salen del corral con unos 500 kilos, para lograr más de 250 kilos de carnes y obtener todos los cortes. Son unos 16 cortes, más del doble que la cuota Hilton. Esta actividad moviliza además una gran actividad, como el suministro de comidas para el ganados, incluyendo insumos clave como la energía en las raciones.Es claro que este sistema va a ir tecnificando a la recría, siempre y cuando los precios ayuden a enfrentar los mayores costos de producción, concluyó Martinicorena.
Fuente: Observa
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