Esta es una variedad que con retención de nutrientes igualmente produce entre 20 y 23 mil kilos de materia seca por hectárea, agregándosele fertilizantes pasan a duplicar su producción de materia seca, lo que habla de volúmenes de pasto muy importantes, con la particularidad de que es una pastura perenne y luego de establecida dura muchos años, con lo que se disminuyen costos y minimiza los problemas erosivos de los suelos. La única limitante del cultivo es que si no se maneja adecuadamente no expresa todo su potencial cosa que ocurre normalmente con todos los cultivos implantados. En invierno es conveniente no pastorearlas y dejarlas así hasta que inicien el rebrote en la primavera siguiente
Pastura de excelente potencial
“Esta es una pastura con una enorme potencialidad –explica Carriquiri- se adapta muy bien a distintos suelos, hay experiencias muy buenas en zonas de basalto y además en Cerro Largo también se está experimentando con el pasto elefante. Lo que se verá en esta gira son cultivos con un desarrollo de más de dos metros y medio de altura, y otros plantados en otras zonas pero en las mismas condiciones con cincuenta a sesenta centímetros de altura, aunque diferenciándose en los manejos que el mismo ha tenido. Esta es un pastura que en dos meses y medio alcanza los dos metros y medio de altura si no se pastorea, se adapta a todo tipo de suelos y responde rápidamente al uso de fertilizantes”.
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