AGRO 2.0 Un tratamiento único de prostaglandina a dosis elevadas que induce una mayor luteólisis

Investigadores de la CEU-UCH muestran por primera vez el efecto de un tratamiento único de prostaglandina a dosis elevada que induce una mayor luteólisis e incrementa la fertilidad de vacas lecheras

El Grupo de investigación en Endocrinología, Inmunología y fisiopatología de la reproducción en rumiantes y équidos de la Facultad de Veterinaria de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia ha desarrollado un nuevo protocolo de administración de la prostaglandina PFG2α que mejora el grado de luteólisis antes de la inseminación artificial y, potencialmente, la fertilidad de las vacas lecheras. La administración de una única dosis doble de este compuesto, frente a los protocolos actuales que recomiendan dos dosis separadas 24 horas, ha mejorado los resultados de luteólisis de las vacas tratadas. Este nuevo protocolo, publicado en la revista norteamericana Journal of Dairy Science, podría contribuir a mejorar la productividad de las granjas bovinas y reducir las intervenciones veterinarias requeridas para este tipo de tratamientos.

Según señalan los investigadores, una parte muy importante de la labor veterinaria en el control reproductivo para maximizar la producción de las explotaciones bovinas es la manipulación del ciclo estral de las hembras, mediante la inducción de la luteólisis y la consiguiente ovulación en estos animales. En esta investigación, se ha podido demostrar que una dosis doble de prostaglandina PFG2α administrada 3,5 días después de la ovulación permite incrementar la luteólisis parcial de las vacas en un 78% y la total en un 22%. Este resultado demuestra que la sensibilidad del cuerpo lúteo de las vacas frente a la PGF2α puede verse influenciada también por la dosis administrada y no sólo por la edad del cuerpo lúteo y el número de tratamientos aplicados al animal, como hasta ahora se había establecido.

Además, han analizado también el momento idóneo de administración de la prostaglandina. Hasta el momento, las investigaciones más recientes recomendaban que este tipo de tratamiento luteólitico se administrara en dos aplicaciones espaciadas 24 horas, a los 5 y 6 días tras la primera aplicación de la hormona GnRH. La investigación ha puesto de manifiesto que este modelo de aplicación luteolítica doble puede reemplazarse por una única administración de PGF2α en una dosis más elevada, seis días después de administrar la hormona GnRH, sin alterar negativamente la respuesta luteolítica obtenida y el diámetro preovulatorio del folículo dominante. De este modo, se reduce el manejo de los animales, por lo que se mejora su bienestar.

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