La pregunta me viene a la mente, luego de que Warren Buffett “saliera de compras” recientemente y se inclinara por el sector de maquinaria agrícola y de alimentos.
Para entender esta curiosidad hay que hacer una pequeña remembranza del señor Buffett y sus negocios. Hijo de un corredor de bolsa y bien formado como economista al lado de famosos gurús de las inversiones, Buffett heredó el olfato por los valores accionarios (acciones de empresas que se cotizan en bolsas de valores); con los cuales multiplicó sus primeros $9.800 allá por los años 60, hasta ocupar hoy el cuarto lugar entre las personas más ricas del mundo, de acuerdo con la revista Forbes.
En Wall Street Buffett se volvió rápidamente famoso por su filosofía inversora, basada en la conformación de un portafolio de acciones de empresas financieramente sólidas y siempre de largo plazo. El nombre de Buffett se catapultó rápidamente por sus resultados financieros. En no pocas ocasiones, los resultados anuales de su portafolio de inversión superaron hasta en 10 veces el promedio del mercado. Sus biógrafos cuentan que el solo hecho de que el señor Buffett comentara su interés por una empresa en particular, disparaba automáticamente el valor de sus acciones, convirtiéndose hasta el día de hoy en uno de los principales gurús de las finanzas, el líder a seguir.
La filosofía de este gurú a sus 82 años sigue siendo la misma, analizar los negocios con una visión de largo plazo, considerando tanto la solides financiera del momento como la calidad del equipo gerencial y, especialmente, el contexto del negocio, sus tendencias y promesas de valor futuro. Por eso sus inversiones son consideradas por muchos como una señal de hacia dónde van los negocios.
Es en ese contexto que muchos nos preguntamos qué está viendo Buffett en la agricultura y los alimentos, al decidir sumar a su portafolio de inversiones a John Deere, uno de los mayores fabricantes de equipos agrícolas del mundo, y a Heinz, una gigantesca compañía de alimentos con negocios globales. La inversión de Buffett, a través de su famoso conglomerado de empresas, Berkshire Hathaway, en John Deere fue de 340 millones de dólares, lejos todavía de poder obtener control de ella, pero, significativa sin duda alguna.
En Heinz la apuesta fue más grande, Berkshire Hathaway y una firma de inversiones de Brasil llamada 3G, llegaron a un acuerdo de oferta pública para adquirir el control total de Heinz por la suma de $23.000 millones, asumiendo además una deuda de $4.000 millones.
En el mundo de los negocios también se vale imaginar conspiraciones para intentar comprender lo que está pasando, o lo que ciertos actores están viendo y obviamente no nos cuentan. Mi primera versión de esta “conspiración” de largo plazo surge asociando el eje Berkshire Hathaway (capital de largo plazo) – John Deere (agricultura) – 3G (Brasil) – Heinz (alimentos).
Mi interpretación de esta apuesta financiera es que Warren Buffet está viendo en la agricultura y en su eslabón inmediato posterior, la alimentación, un futuro promisorio. Pero, además apunta a socios del gigante agrícola de América Latina, Brasil, para consolidar su apuesta del futuro. Y creo que no es casualidad, en el largo plazo seremos más de 9.000 millones de personas (año 2.050), y de acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), para alimentar esa población será necesario incrementar la disponibilidad de alimentos entre 50% y 60% de lo que tenemos hoy.
Adicionalmente, de acuerdo con investigaciones del Banco Mundial, Latinoamérica y África son las regiones con más potencial para la expansión agrícola, 36% y 37% respectivamente; muy por encima de Europa del Este y Asia Central que cuentan con 17% de capacidad de expansión de su frontera agrícola. Así que apuntar a Brasil sería una muy buena idea si se tiene interés en consolidar negocios en la agricultura y la alimentación.
¿Qué guarda la agricultura del futuro para que empiecen a verse apuestas financieras tan importantes de empresas visionarias?, sin duda un negocio creciente junto a su hermana, la industrialización de alimentos. Ojala en Centroamérica podamos visualizar a tiempo este futuro y nos preocupemos por innovar y llevar tecnología al campo, sino nos va a dejar el tren.
Fuente: revistamyt.com
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