El vehículo que transportaba la carga era conducido por Ireneo Villalba Benítez. Se trataría de productos de origen argentino y no contaba con documentos que respalden su legalidad.
Durante la intervención Villalba aseguró que la carga pertenecía a la empresa Relmó Paraguay, propietaria de eventos tecnológicos.
La incautación se llevó a cabo durante una fiscalización de rutina de los técnicos de la institución. Todos los antecedentes del caso fueron elevados para continuar con los procesos correspondientes.
El ingreso ilegal de materiales de multiplicación trasgreden además las normativas vigentes que adoptan normas de protección fitosanitaria. Se sospecha que este tipo de maniobras es práctica común de empresas semilleras dedicadas al comercio del material genético denominado RR.
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