En México se consume maíz genéticamente modificado todos los días, pero no se produce. Al respecto Mario Valdés Berlanga presidente del Consejo Agropecuario de La Laguna, considera que ante la negativa, se ha desaprovechado la oportunidad para ser autosuficiententes en el abasto del principal alimento del país.
El entrevistado habló de la necesidad de convencer a los legisladores, la Secretaría de Agricultura (Sagarpa) y a Recursos Naturales (Semarnat), sobre las bondades que ofrece el maíz genéticamente modificado.
En la Comarca Lagunera ya se han realizado plantaciones de este grano, en fase experimental, y los resultados han convencido a los productores forrajeros.
Y es que la variante de maíz probada en La Laguna, tiene un 25 por ciento más de rendimiento, requiere de menos riegos y ni siquiera emplea insecticidas, debido a su resistencia a las plagas.
Valdés Berlanga, refirió que en el país se consume el maíz transgénico desde hace 17 años, debido a la necesidad que existe de importar parte de este alimento básico en la dieta de los mexicanos.
CONTRADICCIÓN
Es de mencionar que en abril pasado, la Sagarpa admitió que el maíz que no se produce en México, al igual que la soya, son genéticamente modificados.
Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés), México importa 10 toneladas de maíz, al año.
Mario Valdés, apuntó que este es un claro ejemplo de la necesidad que existe de buscar alternativas para poder ser una nación autosuficiente en la producción alimentaria.
Ejemplificó que la producción de algodón en la Comarca Lagunera, ha sido exitosa debido a que la semilla ha sido modificada genéticamente (con permiso), de lo contrario, otra cosa sería.
Resguardo
No existe el riesgo de que se pierda la base de los alimentos genéticamente modificados, debido a que la universidades más importantes tienen bancos de germoplasma.
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