AGRO 2.0

Agro 2.0 MÉXICO: Pescadores entre la pobreza e indiferencia

Santa Gertrudis Miramar, Tehuantepec, Oaxaca.-El sonido de las olas del mar que golpea la orilla de la playa inunda el ambiente ante la indiferencia de decenas de pescadores de la comunidad de Santa Gertrudis Miramar, que llegan a Playa Chipehua a preparar sus embarcaciones para hacerse a la mar en busca del sustento de sus familias.
Cada grupo de entre cinco y seis pescadores prepara el motor, y las artes de pesca, la fuerza de todos se hace una para arrimar a la embarcación al agua y aprovechar la fuerza de las olas para meterla mar adentro.
Con los primeros rayos del sol pegándole en sus rostros, los pescadores se hacen a la mar, apenas son las seis de la mañana, es la hora en la que algunos empiezan a llegar, otros lo harán más tarde, pero todos al final se introducen mar adentro para obtener una buena pesca.
En la playa comienzan a llegar los compradores de pescado, la pequeñas palapas que existen en la zona comienzan sus actividades, en la orilla las gaviotas se arremolinan en busca de desechos de pescado, y en el horizonte las lanchas se pierden en la inmensidad del mar.
Así, mientras algunos de sus compañeros ya se fueron, don Paulo habla de su vida como pescador, a sus 49 años relata que desde niño su padre le enseñó a pescar. Su vida en esta comunidad perteneciente al municipio de Tehuantepec, no ha sido fácil, dice, mientras deja a un lado sus artes para platicar.
Padre de dos hijos, él y su esposa trabajan arduamente para sacar lo necesario para alimentar a la familia y poderles dar una mejor vida “nadie se acostumbra a vivir en la pobreza, pero a veces no queda de otra, aquí la pesca es la vida de cientas de familias y a veces el mar ya no da para más” dice.
Y es que desde ‘chamaco’ su padre le enseñó a pescar, todos los días transitan los cuatro kilómetros desde Santa Gertrudis a la playa, la cual se encuentra en muy mal estado. Hay parte en que se encuentra destrozado literalmente, ante la indiferencia de las autoridades municipales.
Cruzado de brazos, resignado a vivir entre la riqueza natural y la pobreza extrema, don Paulo explica que hay semanas en las que, cuando la pesca es buena, llegan a sacar hasta 5,000 pesos que son divididos: el 50% para el patrón y el resto entre los otros cinco que integran el grupo, es decir que en una semana de pesca buena apenas llegan a cobrar 500 pesos.
“Cuando la pesca es mala apenas si sacamos los cien pesos a la semana y cuando baja el norte, nadie se viene a parar a la playa” expresa.
Al igual que él, en otra embarcación cercana, Gildardo Trinidad acomoda el motor a la lancha, mientras sus compañeros de grupo acomodan las redes, y luego todos juntos cargan en sus hombros un tronco para jalar la lancha hacia el mar.
Un poco tímido, a sus 38 años habla de su familia, da gracias a Dios que sus hijos ya estén grandes y que lo ayuden, y que ahora su vida la pase entre la pesca y el campo.
“Nada alcanza, pero no hay otro recurso, todo el tiempo estamos jodidos, que le vamos hacer” dice, mientras una ola lograr introducir mar adentro a la embarcación y aprovechan para iniciar su viaje mar adentro.
Todos los días en Santa Gertrudis Miramar, los pescadores acuden, cuando no hay fuertes norte, a la playa chipehua en donde alistan sus embarcaciones y salen a las 6 ó 7 de la mañana, por varias horas se hacen a la mar y entre las 9 y las 11 regresan, algunos con buena pesca, otros apenas con lo indispensable para que coman sus familias.
Y es que aunado a lo poco que a veces les da el mar, los bajos precios del pescado hacen más crítica la situación de los pescadores, que además de vivir en la apatía de las autoridades municipales, se tienen que acostumbrar a vivir en la pobreza. 

Visitas: 55

Comentar

¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!

Participar en AGRO 2.0

Automatic translator

AGRO 2.0

Miembros

Visitas (desde 24-04-12)

Distintivo

Cargando…

© 2025   Creado por AGRO 2.0.   Tecnología de

Emblemas  |  Reportar un problema  |  Términos de servicio