El principal importador de trigo de Asia está preocupado por las existencias de la variedad de trigo que necesita para elaborar tortas y pastelería, y su vuelta al mercado apuntalaría los precios del trigo blanco occidental, fuertemente golpeado a raíz de temores sobre la variedad no aprobada.
“El gobierno intenta reanudar las importaciones cuanto antes, siempre que se pueda garantizar la seguridad”, dijo una fuente de la industria que habló en condiciones de anonimato.
“Sin embargo, es muy difícil establecer fechas para la próxima semana o la semana después, entonces están diciendo que preferirían reiniciar en agosto”, dijo la fuente.
El ministerio de agricultura de Japón ha dicho que las importaciones no podrían comenzar antes de que reciba detalles de una investigación estadounidense sobre la forma en que una variedad de trigo GM de trigo desarrollada por Monsanto Co MON.N, pero que nunca entró en producción comercial, ingresó en el sistema.
También ha dicho que Estados Unidos debería implementar chequeos para envíos en el futuro antes de embarcarlos al exterior.
No estaba claro si estas condiciones serían satisfechas para agosto, pero las fuentes dijeron que el gobierno cree que es posible.
“El inicio de las compras depende de los avances de las tratativas con Estados Unidos. Hay algunas condiciones”, dijo Toru Hisazome, un funcionario del ministerio de agricultura involucrado en el comercio de trigo, sin responder con más detalles a preguntas sobre la fecha de reinicio.
Las existencias en molinos japoneses han estado en disminución desde las 150.000 toneladas, o 2,3 meses de suministro, almacenadas antes del anuncio del hallazgo de la variedad GM a fines de mayo.
A las existencias se agregará un total de 170.000 toneladas compradas antes de la entrada en vigor de la veda a la importación, que el gobierno está examinando. Después de eso, las existencias continuarán disminuyendo a menos que se interrumpa la veda.
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