Hoy en día la innovación tecnológica se ha extendido a todos los sectores y ámbitos de nuestra vida y por tanto en el sector agrícola la evolución en maquinaria y herramientas de trabajo, también se refleja en conceptos como diseño, ergonomía, mejor funcionamiento, eficacia, perfeccionamiento, etc…

El concepto de Innovación es uno de los pilares en los que se sustenta la estrategia de Matabi a la hora de desarrollar sus pulverizadores. Esto lo podemos comprobar con el lanzamiento de la familia Evolution en sus dos nuevos productos: Evolution 16 y E+, totalmente innovadores y que incorporan una serie de mejoras que ayudan en la labor del agricultor.

En este post, nos centraremos en el nuevo pulverizador de espalda eléctrico E+.

En los estudios de investigación realizados por el equipo de pulverización y los técnicos especialistas de nuestro centro tecnológico de I+D+i – Olaker – el objetivo a obtener en el proyecto era claro: facilitar el trabajo del agricultor, manteniendo la eficiencia y eficacia en los tratamientos fitosanitarios.

El resultado de esta investigación, ha sido el desarrollo de un pulverizador de mochila eléctrico a batería, que mantiene todos los parámetros de eficacia que puede ofrecer una mochila manual con regulador de presión y buenas boquillas (permitiendo el ahorro de producto fitosanitario y agua), con el solo hecho de accionar la maneta (sin tener que dar emboladas para generar presión y poder pulverizar). La mejora en cuanto a esfuerzo de trabajo es evidente y considerable.

Unido a esto, otra premisa muy importante es la ergonomía, consiguiendo que nuestros pulverizadores aporten más comodidad en el proceso de pulverización del agricultor. El resultado de los trabajos de investigación han permitido realizar una mochila adaptada a la morfología del cuerpo humano, ayudándole con unas correas acolchadas y un cinturón.

En Matabi apostamos por la innovación continua, por ello, desarrollamos boquillas específicas, que junto con el uso de nuestro regulador de presión, conseguimos que el agricultor ahorre en:

- Esfuerzo (menos emboladas en los aparatos manuales) facilitándole el proceso de pulverización.

- Producto y agua. Gracias al regulador de presión, el proceso de pulverización se mantiene constante siendo más respetuoso con el medio ambiente, utilizando el producto justo y necesario según los parámetros de pulverización. El tratamiento es más controlado, efectivo y de calidad.

Fuente: infoagro