AGRO 2.0 GUATEMALA Las cifras del agro

El sector rural produce una parte importante de la riqueza del país, pero refleja una alta precariedad en los ingresos y la mayor concentración de pobreza y pobreza extrema.

Y unas horas después, la Cámara del Agro presentó un amparo, frente a la Corte de Constitucionalidad, en contra del Presidente del Congreso y la Junta Directiva, para impedir que esta ley sea conocida por el Legislativo.

El debate sobre el sector rural de Guatemala es uno de los temas estructurales cuyo abordaje es gran dificultad. De hecho, la ley en el centro de la disputa tiene doce años en el estado de iniciativa. Durante la mayor parte de este período, el conocimiento sobre la situación del agro, se ha llevado sobre la ausencia de información estadística oficial, que debía informar la formación de las políticas públicas para abordar este sector.

Esta falta de información apenas ha empezado a ser superada en los últimos años. En este camino de levantar datos, y hacerlos disponibles para quienes deben tomar decisiones, es necesario resaltar que el Instituto Nacional de Estadística, presentó el pasado 15 de noviembre, la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (ENEI), correspondiente a 2012.

Y las cifras presentan una realidad que se puede sintetizar de la siguiente forma: la Población Ocupada de Guatemala asciende a alrededor de 6 millones de personas, de las cuales, alrededor de la mitad, 2.9 millones, se ubica en el área rural, y se compone en un 67.3% de hombres y en un 32.7% de mujeres. Esta población tiene en su mayoría más de 25 años, y es en un 50.7% indígena.

La agricultura es el mayor proveedor de empleos en Guatemala, con un 32%, seguida por el comercio, 29% y la industria, 13.7%. Casi dos millones de personas (1.9) trabajan en labores agrícolas. De estas, la inmensa mayoría se ubica en el sector rural (1.4 millones).

Las jornadas laborales para más de una cuarta parte de los trabajadores en el sector rural exceden de las 48 horas a la semana. Sin embargo, el salario promedio de quienes se ocupan en la agricultura es Q.746 al mes, muy por debajo de mínimo vital, y de los salarios para otras actividades. La cobertura de la seguridad social alcanza apenas al 10.7% de los trabajadores del sector rural.

El trabajo infantil, siempre de acuerdo a los datos de la ENEI 2012, tiene rostro indígena, y se ubica en el área rural, principalmente en la agricultura, 67.1%. De la misma forma, la economía informal es mayoritaria en el área rural. Un 84.5% de los trabajadores del sector rural laboran en condiciones de informalidad.

Adicionalmente, de acuerdo con la ENEI 2011, la pobreza y la pobreza extrema, se ubican principalmente en el área rural, con un 71.35% del total nacional.

La Encuesta Nacional Agropecuaria de 2010 (ENA), señala que Guatemala tiene una superficie total cultivada de 1,4 millones de hectáreas. De ese total, el 38,4% se destina a los cultivos anuales, es decir, maíz blanco, frijol y maíz amarillo El 61,6% restante se dedica a cultivos permanentes y semipermanentes, esto es café, caña de azúcar, hule y la palma africana, que son de hecho, parte de los principales productos de exportación del país.

Las cifras pueden parecer frívolas. Pero brindan el contexto para el debate sobre el agro. El sector rural produce una parte importante de la riqueza del país, pero refleja una alta precariedad en los ingresos y la mayor concentración de pobreza y pobreza extrema. Y varias consideraciones deben hacerse sobre este tema, incluyendo el preservar el escaso empleo formal que existe en el sector rural, y la generación de divisas, además de buscar las herramientas para la superación de la pobreza y fomentar el modelo de economía campesina.

Como una nota final, no deja de resultar contradictorio que el mismo Congreso que hace una semana sirvió en bandeja de plata las reformas a la ley de telecomunicaciones, a una parte del sector privado, se encuentre en el centro de la disputa con la Cámara del Agro, y mostrando un compromiso con los sectores sociales con los que ha escalado la conflictividad a partir de los sucesos de la cumbre de Alaska. Seguramente no hemos visto aún el capítulo final en esta historia.

Fuente: plazapublica.com.gt