Más suaves, más afrutados, más picantes…La Comunidad de Madrid está llevando a cabo una cata de aceite entre consumidores para identificar el preferido por los madrileños y trasladar esta receta a los productores, con el objetivo de hacer más competitivo el aceite de oliva virgen de Madrid. Estas catas se desarrollan en varios centros comerciales de la capital, para conseguir al menos la opinión de 100 consumidores madrileños con distintos perfiles de nivel socioeconómico, edad y sexo y conocer así la aceptación sensorial de diferentes mezclas o «coupages» de aceites de oliva virgen extra de la región.
En definitiva, se pretende determinar cuál es ese perfil que el madrileño está más dispuesto a comprar y a disfrutar, una vez garantizada la máxima calidad de la oferta que se le va a hacer. Estas mezclas se han elaborado en el Instituto Madrileño de Investigación y Desarrollo Rural, Agrario y Alimentario (IMIDRA) con distintas variedades de aceituna recogidas en su momento óptimo de maduración.
Todos las mezclas tienen como base la variedad Cornicabra, mayoritaria en las explotaciones olivareras de la región. Es decir, a partir de distintos aceites mono varietales –elaborados con una variedad de las mayoritarias de la comunidad– se realizan mezclas que persiguen obtener distintos aceites buscando obtener el perfil que más gusta a los madrileños.
Este será el «superaceite», cuya receta de combinación se entregará al sector elaborador de la Comunidad de Madrid. En esta receta irán especificados los momentos de recolección y los valores o parámetros de calidad de las variedades de aceituna que han servido para elaborar los aceites de partida.
fuente: abc.es
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