El agro altoaragonés se muestra optimista con las intensas precipitaciones de las últimas semanas. La cantidad de agua embalsada y las reservas de nieve garantizan el agua para la campaña de regadío. En cuanto al secano, la lluvia ha venido muy bien aunque en el sur de la provincia ha sido insuficiente.
Las principales consecuencias de estas precipitaciones son la recuperación del agua embalsada y las reservas de nieve. Gracias a ello, se puede planificar a largo plazo la campaña de siembra de cereal de primavera (maíz y arroz) en el regadío altoaragonés.
También para el secano las precipitaciones han sido muy bien recibidas y, en caso de mantenerse, se podría hablar de un buen año. De todas formas, desde el sector prefieren ser prudentes ya que en el sur de la provincia la lluvia no es tan abundante.
El agua caída, además, beneficia mucho a los pastos naturales para que la ganadería extensiva pueda pastar y reducir así costes de alimentación.
El sector agrícola viene de un año malo, incluida una petición de Decreto de Sequía este verano por la falta de precipitaciones. Así que, tras esta temporada de lluvias, hay optimismo. Hoy los embalses están llenos y hay mucha nieve en la montaña que garantizará agua con los deshielos.
fuente: radiohuesca
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