AGRO 2.0 ESPAÑA Las lluvias salvan el cultivo de flores y hortalizas

Las lluvias caídas durante las dos últimas semanas y las altas temperaturas han salvado los cultivos de flores y hortalizas de la Comarca Nordeste. El tiempo ha dado un respiro a los 2.000 agricultores de la zona. Es la primera buena noticia tras un año de sequía, la peor desde que empezaran a registrarse las precipitaciones en las Islas en 1968.

La combinación de la lluvia con temperaturas en torno a los 25 grados centígrados beneficia, sobre todo, al tipo de cultivo que se da en la costa lagunera. "Hay dos factores importantes que nos hacen ser optimistas: las reservas se han recuperado y la calidad del agua que estamos empleando ahora en el riego es mucho mejor", explicó el director de producción de la Cooperativa Agrícola Cosecheros de Tejina, Hernán Tejera.

Las balsas que nutren a los trabajadores del campo lagunero se han recuperado. Valle Molina, la más importante, ha pasado de estar prácticamente vacía a contar con 158.331 metros cúbicos, el 26% de su capacidad. En El Boquerón hay ya 27.236 metros cúbicos almacenados.

La calidad del agua que se estaba usando para el riego en La Laguna era uno de los principales quebraderos de cabeza para los técnicos agrónomos. Durante el verano, el Cabildo de Tenerife realizó envíos de agua de emergencia desde las galerías del Norte. La medida, aunque redujo los cortes de agua, tuvo una consecuencia negativa: su alto contenido salino era perjudicial para los terrenos. Las temperaturas, además, se han mantenido estables durante el otoño, sin cambios drásticos. "Esto también favorece el desarrollo vegetativo", puntualizó el experto lagunero.

El cultivo de la flor cortada ha sido uno de los más favorecidos por esta nueva situación. La Laguna es líder en este sector con 231 hectáreas de tierra dedicadas a las plantas de ornamentación. "Exige mucho riego y ahora se va a recuperar, sobre todo el que no está bajo plástico y se beneficia directamente de la lluvia", añadió Tejera.

No obstante, los agricultores laguneros lamentaron las pérdidas que esas mismas precipitaciones han ocasionado en otras zonas de la Isla. "Lo que para nosotros ha sido una bendición para las plataneras del norte de Tenerife es una tragedia porque han perdido todas sus cosechas y dependen de los seguros para subsistir", destacó Tejera.

El consejero insular de Agricultura, José Joaquín Bethencourt, confirmó las buenas noticias para el sector primario local. "La capacidad de agua en las balsas que nutren a los agricultores se ha multiplicado por seis en los últimos días", precisó.
"Este es un respiro importante porque, además de acumular agua para los próximos meses, las estimaciones apuntan a que habrá nuevas precipitaciones", añadió el representante del Cabildo de Tenerife. Bethencourt confirmó que, de momento, "podemos apartar el fantasma de la sequía, pero debemos ser previsores, limitar el consumo y empezar a ahorrar agua para evitar sustos el próximo verano", concluyó.

Fuente: laopinion.es