Pese a las voces que a principios de la campaña auguraban descensos en la exportación de cítricos en la provincia de Castellón debido al notable descenso de producción de la variedad estrella, la clemenules, los primeros datos facilitados por el ICEX advierten de que en los dos primeros meses de campaña -septiembre y octubre- ya se separaron las expectativas de venta al exterior, fijándose a finales de octubre, un aumento de cuatro por ciento en la exportación de mandarinas respecto al mismo periodo del año anterior. Aunque esta circunstancia no ha servido, de momento, para elevar los precios que reciben los agricultores castellonenses en el campo.
Y es que, a pocos días de finalizar la campaña de clemenules en Castellón, el representante de la Unió de Llauradors i Ramaders en la provincia, Vicent Goterris, explica que «aunque los precios han mejorado sensiblemente y se calculamos que se pagará 12 y 18 céntimos de euros en las liquidaciones todavía son cifras muy bajas. Lo ideal es que la clemenules estuviese en 24 céntimos el kilo para asegurar la rentabilidad del productor».
«Seguimos intentando sobrevivir, los costes de producción siguen creciendo por encima de lo que ganamos pues, la mejora en el precio apenas es significativa porque veníamos de cantidades muy bajas, entre seis y diez céntimos», seguía explicando Goterris quien, de todos modos y pese a que «sí se ha notado una fuerte caída en la producción de alrededor del 20 por ciento», auguraba que la exportación seguirán creciendo en estos meses.
«La temporada fuerte va desde octubre a enero, pero vemos que hay mucho interés en el mercado y la climatología nos está acompañando, sobre todo porque este año nos hemos salvado de las heladas que perjudican mucho a la fruta», señaló.
El mayor incremento en la exportación de clementinas, al inicio de la campaña, se dio en el mes de septiembre, con un 62 por ciento más de toneladas que el año anterior. Un hecho que, Goterris explicaba señalando que «la larga sequía que vivimos el año pasado y el intenso calor del verano acabaron por adelantar la campaña de las variedades más tempranas, que desembarcaron ya en septiembre en el mercado. Así, la venta de estas variedades se concentró prácticamente en el mes de septiembre, lo que elevó mucho la cifra pese a que, en realidad no haya tantas toneladas en la provincia».
Tras ese mes, de hecho, se nota un cierto descenso de la venta al exterior con un uno por ciento menos en octubre que el mismo mes del año anterior, ya que las mismas condiciones climatológicas que adelantaron las variedades tempranas y pretempranas, provocaron un ligero retraso en la clemenules, cuya temporada fuerte no comenzó hasta finales de ese mes, juntándose también con varios episodios de lluvias que impidieron a los 'collidors' entrar en los campos.
De todas formas, el pasado mes de diciembre, desde Fepac-Asaja ya elevaban el porcentaje de exportaciones de cítricos en la provincia a un ocho por ciento por encima de 2011, destacando un notable incremento de fruta en el mercado en relación con la última campaña pero señalaban que «la presente campaña no alcanzará las cifras de comercialización del año pasado al no haber suficiente cosecha para ello, aunque se dan las condiciones comerciales para volver a rebasar los datos récord registrados en agosto».
fuente: lasprovincias.es
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