El IPOD del pasado mes de febrero (Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos) muestra que los ganaderos reciben por su ternera 4,23 euros, mientras que los consumidores pagan 17,25 euros. El precio se multiplica por 4,08. El consumo de carne de ternera en España (y también en Aragón) es bajo; y se nota mucho, cada vez más, el estar a comienzos o a finales de mes.
Ángel Aznar, productor de ternera del Valle de Broto, confirma que el mercado se anima algo a comienzos de mes, y añade que la situación es catastrófica a finales. Se pregunta además qué ocurriría en muchas familias de no tener las pensiones de los mayores.
El consumo alimentario de los españoles en el hogar y fuera del hogar sigue bajando. El volumen global relativo a 2012 ascendía a 100.678 millones de euros; es un 1,3 por ciento menos que el montante correspondiente a 2011 (un año en el que se registraba otro descenso, en este caso del 1,8 por ciento respecto a 2010).
Ángel Aznar reconoce que hay mucha preocupación en el sector vacuno, ya que hay poco consumo, los costes de explotación son altos y, además, se reducen las ayudas en un 60 por ciento.
En cuanto a los mercados internacionales, la exportación ha estado manteniendo a este sector; sin embargo, en la pasada Lonja de Binéfar se afirmaba que comienza a preocupar la lentitud en la exportación de machos. Hay que apuntar que el inicio de mes ha propiciado una mayor demanda de hembras y de ganado frisón.
Es noticia además que Tailandia abre sus fronteras a las importaciones de animales y carne de vacuno de 18 países europeos (entre ellos España).
Fuente: diariodelcampo.com
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