A pesar de las dificultades actuales y la crisis, el Grupo AN ha conseguido incrementar el empleo y mantener el programa de inversiones, con una nueva incubadora, funcionando con muy buenos índices de fertilidad y productividad; la apertura de 7 nuevas gasolineras; y sistemas de mejora para los crecimientos de AN Avícola y 4ª gama de vegetales, con nuevos invernaderos.
El Grupo AN ha incrementado el volumen de negocio en el último ejercicio económico (1 de julio de 2011 a 30 junio 2012) un 19%, con una facturación de 665 millones de euros de los que 559,8 millones están ya consolidados en balance. En un ejercicio durísimo, en el que a pesar de las reestructuraciones el Grupo AN ha logrado crear empleo neto al pasar de 1.097 a 1.245 trabajadores, ha descendido el margen de explotación un 6%. No obstante, los resultados netos consolidados han aumentado un 7,5%, alcanzando los 6,2 millones de beneficio frente a los 5,7 millones del ejercicio anterior, gracias a plusvalías y dividendos de las empresas participadas. Resultados que pemiten pagar un interés anual del 4,937% a los suscriptores de títulos participativos de 1.000 euros y del 5,879% a los de 10.000 euros. El Cash-Flow (beneficios más amortizaciones) ha crecido un 14%, situándose en 10,2 millones, manteniéndose las inversiones previstas para poner en marcha la nueva incubadora de Marcilla, con muy buenos resultados, la apertura de gasolineras, invernaderos...
Los grandes volúmenes del Grupo AN, que se consolida como la mayor cooperativa cerealista de España (más de 1 millón de Tm.) y se sitúa como uno de los principales operadores avícolas (venta de más de 150.000 pollos diarios), unidos a los problemas de crédito de muchos clientes agravan la situación actual, con productos cárnicos y hortofrutícolas con precios por debajo de costes, y obligan a extremar el control de riesgos y mantener la tradicional austeridad para, desde la capitalización, aprovechar las oportunidades de negocio que surjan, según fuentes del grupo.
Todas las actividades de la empresa crecen, con cereales y avicultura como motores principales que tiran de semillas, fitosanitarios, fertilizantes, piensos e incubadoras. Los altos precios de los cereales, sobre todo a partir de enero, arrastran al resto de actividades, incrementando los problemas en avicultura porque no se logra trasladar el aumento al precio de la carne, por lo que se estrangulan los márgenes. Aumentan también la facturación carburantes, con la apertura de nuevas instalaciones; repuestos, gracias al efecto del Canal de Navarra en los sistemas de riego; y seguros, a pesar de que la revisión de la cartera a los clientes les reduce los precios de las pólizas de automóviles, hogar y vida; manteniéndose
porcino y descendiendo ligeramente (-1%) frutas y hortalizas debido a los bajos precios del mercado.
La facturación de la matriz cooperativa y las empresas consolidadas en balance pasa de los 470 millones de euros del pasado ejercicio a los 559,85 millones del presente, cifra que refleja el citado crecimiento del 19%. Si se suman las ventas de las empresas sin consolidar, la facturación del Grupo AN alcanza los 665 millones de euros.
Las dificultades económicas afectan al margen de explotación, que baja un 6%. No obstante, los resultados netos consolidados del Grupo AN aumentan un 7,5% gracias a las plusvalías y dividendos de las empresas participadas, pasando de los 5,77 millones de euros del anterior ejercicio a los 6,21 millones del presente. La situación patrimonial de la empresa se ha consolidado con el aumento de los recursos propios y otros fondos sociales, que suman 67,5 millones de euros.
La estabilidad patrimonial de la cooperativa es muy importante para poder acometer con garantías los grandes volúmenes que el crecimiento de la actividad conlleva, sobre todo en unos mercados que siguen marcados tanto por la crisis económica general, con las dificultades de crédito para muchos de los clientes, como por la volatilidad, además de que se mantiene el programa de inversiones contemplado en el Plan Estratégico. Inversiones que han permitido poner en marcha en el ejercicio la nueva incubadora de Marcilla, funcionando con muy buenos índices de fertilidad y productividad; la apertura de 7 nuevas gasolineras; y sistemas de mejora para los crecimientos de AN Avícola y 4ª gama de vegetales, con nuevos invernaderos.
Por otro lado, a pesar de que la crisis ha obligado a la reestructuración de algunas actividades -la más fuerte afectó en ejercicios anteriores al porcino-, la especial sensibilidad del Grupo AN por el empleo ha permitido también crecimiento neto al pasar de los 1.097 trabajadores el ejercicio anterior a los 1.245.
La realidad actual es muy complicada, con varios productos con precios en el mercado por debajo de costes, tanto en avicultura como en frutas y hortalizas, por lo que se mantiene la característica gestión empresarial de austeridad y máximo control de riesgos en un entorno ya descrito de volatilidad, retroceso en el consumo, extrema dificultad financiera para muchos clientes y concentración de la demanda que, por la garantía comercial y seguridad que el Grupo AN ofrece a las cooperativas socias, lleva a crecimientos con la incorporación de nuevos asociados en una zona gegráfica que se va ampliando tanto en Aragón (Jaca) y Castilla y León (Zamora y Soria) como en nuevas regiones, como el Grupo Montes
Norte, de Malagón (Ciudad Real), primer socio de Castilla-La Mancha. Por todo ello, la actual estabilidad patrimonial y capitalización es de vital importancia para hacer frente a la comercialización de los grandes volúmenes, concluir con las inversiones del Plan Estratégico, ejecutado ya al 80%, y aprovechar las oportunidades de negocio que, en este entorno, puedan surgir.
Fuente: cooperativas agroalimentarias
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