José Manuel Lago, miembro de la Coordinadora Ecologista de Asturias y representante de las organizaciones ecologistas de Asturias en el Consejo del Fuego, es coautor de un informe publicado por Greenpeace sobre el cultivo de eucalipto en Portugal y España. Según este estudio, en los últimos años el 74 por ciento de toda la madera cortada en Asturias es eucalipto. El Ayuntamiento de Corvera ha decidido, en el marco de su plan de ordenación -pendiente de su aprobación en la CUOTA- erradicar esta especie del concejo, al igual que el resto de plantas invasoras. Es una iniciativa pionera en Asturias para recuperar la biodiversidad e imponer la plantación de especies autóctonas.
-¿Qué opinión le merece la decisión del Ayuntamiento de Corvera?
-Es una idea muy buena y de futuro, Corvera está planteando un desarrollo más equilibrado y más sostenible desde el punto de vista incluso económico.
-¿Económico? Quizá no piense lo mismo el propietario de un monte de eucaliptos...
-Supongo que la implantación de esta norma no será a las bravas, buscarán compensaciones, acuerdos? Y de momento paralizarán las futuras plantaciones, que ya es un paso muy importante.
-¿Pero cómo puede favorecer la economía el erradicar los eucaliptos?
-El eucalipto no deja de ser un monocultivo. En toda la rasa costera de Asturias, de oeste a este, no hay más que eucaliptos. Todo lo que sea una economía basada en el monocultivo no es buena, eso se estudia en primero de Economía, hay que diversificar. Pero además hay otros aspectos como puede ser el turismo verde, rural. Vendemos el eslogan «Asturias, Paraíso Natural». Y uno de los aspectos fundamentales por los que nos visitan es por nuestro paisaje. Cuidar el paisaje es fundamental. Un paisaje de bosques autóctonos y no de eucaliptos es mucho más vendible y guapo.
-¿Cuál es el secreto de su rápida propagación por el norte de España?
-El eucalipto se expandió sobre todo por los intereses de la papelera. Hubo una política muy agresiva de favorecer las plantaciones de eucaliptos, ofreciendo en su momento también precios inflados para que la gente se animara a plantar. El clima de la rasa costera asturiana también influye. Y el abandono del mundo rural fue otro factor determinante, se fueron abandonando los pastos y se optó por al eucalipto, que se planta y crece solo. Pero además en Asturias hay un problema añadido con el eucalipto, el de la baja productividad. Está al 50 por ciento de lo que podría ser una producción óptima. Producimos 10 metros cúbicos de hectárea al año en vez de 20, que sería lo razonable. Y eso es porque los montes están abandonado. Cualquier plantación forestal necesita una gestión selvícola adecuada para aumentar la producción. Y en Asturias bien cuidados sólo están las hectáreas de Ence, pero la mayoría son lo que conocemos como «palillos». Que se cortan en 10 o12 años.
-¿Y por qué se considera una especie peligrosa?
-Es un árbol de crecimiento muy rápido, absorbe muchos nutrientes del suelo y contribuye a empobrecerlo. La erosión también acidifica el suelo. Y fundamentalmente supone la pérdida de biodiversidad, es una especie muy dominante. En su sotobosque no crecen prácticamente otras especies. Eso trae una pobreza de flora y de fauna. Luego también absorbe mucho agua para poder desarrollarse, está secando fuentes? Genera muchos problemas medioambientales. Además está plantado de forma masiva. No nos podemos oponer a que existan eucaliptos, hay que ser razonables, el papel se necesita. Pero sí estamos en contra de la irracionalidad.
-El eucalipto es la especie arbórea dominante en toda la rasa asturiana...
-Sí, supone en torno del 80 por ciento del arbolado. Lo ideal sería que hubiera una proporción mucho menor. Un estudio del Principado, realizado en 1989, hablaba de que Asturias no estaba en condiciones de soportar más de 40.000 hectáreas de eucalipto. Era un límite del 4 por ciento de la superficie regional, y en aquél momento había 34.000 hectáreas plantadas. Ahora andamos cerca de las 60.000. Y sobre todo si tuviesen plantaciones en producción óptima no haría falta tanta superficie para alcanzar la misma productividad.
-¿Qué otras opciones tienen los propietarios de los montes asturianos para obtener rentabilidad sin necesidad de plantar especies que suponen un peligro para la biodiversidad?
-Habría que apostar por especies de más valor añadido, como las especies autóctonas, ya que la madera se paga a un precio mucho más alto. Claro tienen turnos más largos de crecimiento, el rendimiento es a más largo plazo que los eucaliptos. Y ahora tampoco es un buen momento, porque el desarrollo forestal requiere de inversiones públicas. Esto en época de vacas gordas no se hizo, y ahora es muy difícil que haya el dinero necesario.
-En Corvera también se plantea erradicar todas las demás especies alóctonas invasoras.
-Están las acacias, la palma? Pero es un problema diferente al de los eucaliptos. Las invasoras afectan en todo el territorio mundial, no sólo a Asturias, y producen mucho daño en la biodiversidad. De hecho se considera que son el máximo responsable de la extinción de especies. Vienen de otros hábitats, tanto de flora como de fauna, y traen enfermedades? Aquí tenemos por ejemplo el cangrejo americano, una especie de río que empezó a introducirse y ahora es dominante, el cangrejo autóctono está prácticamente desaparecido.
Fuente: lanuevaespaña.es
© 2024 Creado por AGRO 2.0. Tecnología de
¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!
Participar en AGRO 2.0