El conseller de Agricultura, Medio Ambiente y Territorio, Biel Company, se ha reunido con los representantes de las asociaciones agrarias profesionales y de las cooperativas de Mallorca en una primera toma de contacto para tratar los aspectos principales y los objetivos que el Gobierno de las Islas Baleares pretende recoger en la futura ley agraria de las Islas Baleares. El objetivo de la sesión ha sido invitar al sector a hacer aportaciones ya participar, desde el inicio, en el proceso de elaboración de la primera ley agraria de las Islas Baleares, de la que se prevé tener un primer borrador en un plazo de dos o tres meses y poder remitir al Parlamento a finales de este año oa principios de 2014.
El consejero trasladará este mismo mensaje a los representantes del sector agrario de Menorca, de Ibiza y de Formentera en los encuentros que tiene previstas para las próximas semanas. Con esta normativa autonómica se pretende regular la agricultura, las actividades complementarias y la política agroalimentaria y de desarrollo rural de las Islas Baleares, siempre dentro del marco de la política agraria común (PAC) y de la legislación estatal.
Así, la ley agraria balear regulará la agricultura, la ganadería, la silvicultura y las actividades complementarias, en todos los ámbitos, desde la producción hasta la comercialización. El objetivo principal de la futura norma es mantener y fomentar el tejido agrario de las Islas Baleares, como sector productivo y como garante del medio ambiente, con la incorporación de capital económico y humano, especialmente jóvenes y mujeres, y con la mejora de las estructuras y explotaciones agrarias y de su productividad y eficiencia, como también garantizar un nivel óptimo de sanidad animal y vegetal.
El texto también debe servir para regular y definir las competencias de las administraciones implicadas ya la vez reconocer y compensar la insularidad y la doble insularidad que sufre el sector en todo el archipiélago balear. Otros aspectos que desplegará la ley son la creación de un nuevo registro general agrario y la adecuación de los usos del suelo agrario para ponerlo en valor mediante la diversificación y la incorporación de actividades complementarias que aporten valor añadido.
En este sentido, el nuevo marco legal debe servir para fomentar la investigación, el desarrollo, la innovación, la formación, las nuevas tecnologías y las energías renovables en el entorno agrario y rural. Todo ello debe permitir incrementar el prestigio, la calidad y la rentabilidad de la industria agroalimentaria de las Islas Baleares, para lo cual el texto tratará de manera específica el fomento de la promoción y comercialización de los productos locales de calidad, con denominación de origen y con indicación geográfica protegida.
Fuente: agroinformacion
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