En 2012, el sector hortofrutícola español ha recuperado la normalidad tras la crisis vivida en 2011 a raíz del brote de E. coli en Alemania, además de asistir a la entrada en vigor del nuevo acuerdo agrícola con Marruecos, que ha llevado a cerrar el año con preocupación por los precios.
Las exportaciones españolas de frutas y hortalizas han superado la prueba que supuso la errónea acusación a los pepinos españoles por parte de las autoridades alemanas, que según las estimaciones del sector provocó unas pérdidas de aproximadamente 500 millones de euros.
A pesar de la caída de precios a raíz de esta crisis en la segunda mitad de 2011, en el primer trimestre de 2012 el volumen de exportaciones ya se situó por encima del registrado antes del brote.
La tendencia al alza se ha mantenido a lo largo del año y, según ha asegurado el director de la Federación Española de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas (Fepex), José María Pozancos, se prevé cerrar el ejercicio con un aumento de entre el 5 y el 7 % con respecto a 2011.
Esto se traducirá, ha añadido, en aproximadamente 11 millones de toneladas exportadas con una facturación que previsiblemente superará los 9.000 millones de euros. "El sector se consolida como una pieza estratégica de nuestra agricultura y superará el 60 % del valor de la producción vegetal agraria española", ha asegurado.
En Almería, provincia de procedencia de la partida de pepinos a la que se acusó de ser el origen del brote, este año se han registrado nuevos récords de exportaciones, que hasta septiembre habían crecido un 12,5 % interanual hasta casi 1.300 millones de euros.
La entrada en vigor del nuevo protocolo comercial con Marruecos ha sido otro hito para el sector este año, que ha abierto "un nuevo escenario de competencia" para los productores españoles, en palabras de Pozancos.
El pasado febrero, el Parlamento europeo daba luz verde al nuevo protocolo comercial con Marruecos, a pesar de las intensas críticas de los productores europeos y la oposición del propio ponente en la Eurocámara, el francés José Bové.
El documento aprobado acordaba aumentar las importaciones a tipos reducidos para tomate, berenjena, calabacín, ajo, pepino, naranjas, clementinas, melones y fresas marroquíes, mientras que Marruecos se comprometía también a liberalizar el 45 % de las importaciones agrarias de la Unión Europea (UE) de inmediato, el 61 % en cinco años y el 70 %, en diez.
El nuevo acuerdo entraría en vigor en octubre y, desde noviembre, los productores españoles han denunciado reiteradamente el hundimiento de precios para el tomate y la entrada de importaciones marroquíes sin el correspondiente pago de derechos aduaneros.
Según denunció Fepex en noviembre, el valor de importación desde el inicio de este mes se situó por debajo de los 42,4 euros los 100 kilogramos e incluso alcanzó un "mínimo histórico" de 36 euros los cien kilos, lo que para la federación evidencia que los exportadores no pagan el derecho de aduana correspondiente cuando es inferior a los 46,1 euros de precio de entrada.
Con el objetivo de analizar la evolución de ese acuerdo agrícola, España y Marruecos celebraron el pasado viernes en Madrid el primer comité mixto sobre frutas y hortalizas, con presencia de las asociaciones del sector.
En dicha reunión, el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, y su homólogo marroquí, Aziz Akhannouch destacaron el interés de ambas partes por conseguir precios altos para los productos hortofrutícolas en el mercado europeo.
De cara a 2013, el sector continúa a la espera de la reforma de la Política Agraria Común y su integración en el régimen de pagos directos, así como de la revisión del régimen específico de frutas y hortalizas, sobre el que la Comisión Europea abría este verano una consulta.
Fruto de esta consulta, se espera que las primeras propuestas legislativas se presenten la próxima primavera.
Fuente: infoagro
© 2024 Creado por AGRO 2.0. Tecnología de
¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!
Participar en AGRO 2.0