Aunque las empresas agropecuarias necesitan de los agroquímicos están surgiendo restricciones para su uso cuando hay pueblos cercanos. De modo que el área en la que se pueden aplicar estos productos es cada vez mas reducida. Pero se estableció que, si pudieran conocerse previamente y tenerse en cuenta aspectos como la velocidad del viento, la humedad ambiente, etc., el uso de agroquímicos no implicaría ningún perjuicio para las poblaciones cercanas.
A partir de esta necesidad, la que puede aportar una solución es la industria del software: por ejemplo, trabajando con sensores, GPS, estaciones satelitales y mandos automatizados, para cerrar las válvulas de fumigación cuando hay ciertas condiciones climáticas.
Este es sólo uno de los ejemplos de cómo el sector del software puede colaborar con la industria agropecuaria. De hecho, ya hay empresas agrícola-ganaderas que pueden seguir la trazabilidad de su producción, para saber específicamente qué se hizo en cada lugar del campo y en cada momento, o que animal se alimentó de qué producto. Pero esa información -que después puede ser aprovechada por el exportador o el fabricante de alimentos- no está estandarizada, y no fluye.
Por eso estamos trabajando en normalizar ciertas comunicaciones e integraciones con el INTA, con empresas fabricantes e importadoras de maquinaria agrícola, y con sus proveedores de software.
El primer paso es identificar los datos a estandarizar, luego describir el camino desde cada sector para llegar a esa normalización y capacidad de intercambio.
El proyecto se enmarca en los esfuerzos conjuntos de la Cámara de software (Cessi) con Adimra para promover la innovación en el sector a través de la incorporación de tecnología informática.
El objetivo es que, sin importar qué fabricante de maquinaria o empresa de software haya hecho una determinada especificación, ésta "hable" con el software de gestión y también se comunique con el fabricante de agroinsumos, el de agroquímicos y con el exportador, y ayude a facilitar la presentación de la trazabilidad de la producción.
Lo que proponemos es continuar con los esfuerzos individuales, pero además tratar de crear un marco común, para darle valor a la producción como un todo. Asi podríamos -por ejemplo- tener una trazabilidad del 70 o el 80% de la producción de granos, en vez del 1 o el 2 por ciento que tenemos hoy.
Para eso necesitamos conocer mas y mejor las necesidades y dificultades que tiene el sector agropecuario, de manera de orientar nuestra inversión en investigación y desarrollo a esos aspectos..
Fuente: lanacion.com.ar
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