Por el ingeniero Federico Beltrán, Gerente General – Terra Business SAC
El consumo de
arándanos crece a una tasa de 20% anual en los principales mercados y es evidente que está aún lejos de alcanzar su techo. Una de las principales razones que explica este crecimiento, es que los beneficios para la salud que proporcionan su consumo van mucho más allá de su alta concentración de antioxidantes.
Estudios médicos financiados por la U.S Highbush Blueberry Council (USHBC), están demostrando el beneficio de su consumo en los tratamientos de hipertensión, cáncer, recuperación de lesiones cerebrales, diabetes, disminución de riesgo del Alzheimer y gota.
La búsqueda de la salud es un motor importante del consumo, pero no el único. Recientes estudios de mercado, muestran que el consumo en el segmento de niños y jóvenes es elevado y creciente; “rico, divertido y fácil de comer” son atributos que estos consumidores destacan.
Es impresionante ver en países como Inglaterra y Estados Unidos, las campañas de difusión y promoción de consumo. Los resultados son exitosos, el arándano continúa siendo el producto más rentable, por unidad de superficie, para la industria del retail. De la misma manera cadenas masivas como McDonald y Wendys, entre otras, han introducido el producto fresco y procesado, dentro de su oferta.
Por otro lado miles de nuevas aplicaciones se inscriben anualmente, teniendo como ingrediente principal al arándano. El consumo se está masificando.
En Perú y gracias al acceso que tenemos a la genética moderna, después de haber suscrito el año 2011 el tratado de protección a las obtenciones vegetales (UPOV). Superamos el mito que el arándano sólo podía cultivarse en la sierra, por el requerimiento de frío de las variedades disponibles.
En la actualidad está claro que se pueden desarrollar producciones competitivas de arándano en la costa. Suelos livianos, agua de buena calidad, clima estable, ausencia de lluvias en la temporada de cosecha, escala, mano de obra y facilidades logísticas; son una buena combinación de factores para desarrollar una oferta competitiva.
Empresas pioneras han demostrado que es posible llegar a los mercados en la ventana septiembre – octubre (periodo de escales relativa a nivel mundial), que se puede aprovechar la creciente demanda del mercado internacional y gozar de elevados precios.
Sin embargo es un cultivo sofisticado que tiene a su vez un mercado exigente en calidad e inocuidad. Intensivo en capital y conocimiento.
En el mundo existen veinticinco millones de hectáreas de papa y menos de cien mil hectáreas de arándano. Evidentemente tiene sus detalles.
Como en todo negocio competitivo, habrá ganadores y perdedores. Es muy importante no sobre estimar los beneficios y subestimar los riesgos.
La visión del negocio es que sea un complemento del portafolio de negocios (uva, palta, cítricos, granada, espárragos, etc.) en los cuales tenemos alto posicionamiento en el mercado internacional.
Generador de riqueza y trabajo, el arándano surge además como una estupenda alternativa para aprovechar todo el año la mano de obra, la capacidad instalada de proceso y los canales de distribución
En el hemisferio sur, Chile tiene 30 años en el negocio; Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica 25 años, Argentina y Uruguay 15 años; México 10 años. Perú es el jugador más joven en la región, sin embargo sabemos lo buenos y veloces que podemos ser cuando se trata de una buena oportunidad.
Según mi experiencia existen tres aspectos clave para tener éxito en este negocio y es la elección del lugar de producción, contar con la genética adecuada y tener el conocimiento técnico. Todos los fracasos que ha habido y que lamentablemente seguirán existiendo, están relacionados a fallar en alguno de estos tres aspectos.
Por otro lado, existen riesgos relacionados a un crecimiento explosivo de la oferta nacional o la aparición de nuevos países competidores que apunten a la misma ventana, que tengan mejor acceso a los mercados o mejores condiciones productivas que Perú. En mi opinión, considerando el mercado y la dinámica competitiva, faltan algunos años para llegar a esta situación.
Respecto al desarrollo de una oferta exportable competitiva, los riesgos mayores en la actualidad son el establecimiento de operaciones con plantas de baja calidad genética o la reproducción ilegal de variedades patentadas.
Por otro lado y de acuerdo a leyes internacionales, la fruta obtenida de plantas que no pagaron derechos de royalties puede ser considerada como contrabando en los mercados de consumo.
Situaciones indeseables como estas, dañarían la imagen del país y afectarían el acceso al mercado. El respeto a las patentes y a la propiedad intelectual forman parte de las reglas de juego.
El negocio madurará pronto en nuestro país y para entonces, los mejores jugadores tendrán que haber alcanzado estándares de competitividad global. La diferenciación vendrá del lado de la genética y el conocimiento.
Sin embargo, en compensación a lograr niveles competitivos elevados, la ventana de abastecimiento para los mejores, podría ampliarse y corresponder a parte de la temporada del hemisferio sur.
Los ojos del mercado ya están puestos en el Perú.
¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!
Participar en AGRO 2.0