Las bajas temperaturas y las lluvias vividas en la Vega Baja durante los últimos días han frenado las plagas de pulgón y gusano propias de estas fechas, según explicó el concejal de Agricultura, Aurelio Samper.
El edil concretó que «la lluvia ha servido para limpiar el ambiente y el frío para controlar las plagas de estas fechas». Éstas suelen atacar los cultivos de apio, lechuga, alcachofa y brócoli de las plantaciones locales y descendieron de forma drástica en el mes de octubre, según constató el representante municipal con distintas asociaciones agrarias del municipio y con el Consejo Local Agrario.
El edil de Agricultura también comunicó que en materia de cultivos «este año se esperan mejores resultados que los obtenidos el pasado, y darán al menos un porcentaje de beneficio para el agricultor, aunque sea mínimo».
Fuente: lasprovincias
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