La Federación Nacional de Cafeteros (FNC) de Colombia celebra en 2012 el 50 aniversario de su llegada a Japón, país consolidado como su segundo cliente en el sector gracias a la "altísima calidad" del producto, subrayó hoy a Efe el presidente del organismo, Luis Genaro Muñoz.
"En 1962 Japón consumía 250.000 sacos de café. Hoy consume siete millones y es el segundo cliente de Colombia en volumen y valor. Además, el 80 por ciento es género de altísima calidad, la verdadera clave de este éxito", resaltó Muñoz durante su visita al encuentro anual en Tokio de la Asociación de Café Especial de Japón.
Pese a que la crisis global redujo el volumen de exportación a Japón en 2011 en un 33 por ciento con respecto a 2010, hasta 930.000 sacos, el presidente de la FNC estimó que el café es un "producto afortunado" en tiempos de crisis económicas, pues su mercado "está creciendo".
"El consumo de café en el mundo ha crecido de manera sostenida a un ritmo del 2 por ciento anual en la última década. La excelente noticia para Colombia, además, es que el de alta calidad ha crecido un 7 por ciento", subrayó.
También recordó que los 50 años de presencia en Japón han sido clave para la expansión en Asia Pacífico y en los territorios de la antigua URSS, mercados en los que la FNC tiene "grandes esperanzas" y una presencia cada vez mayor.
Además, destacó la "gran expectativa" que genera la posibilidad de poner en marcha Tratados de Libre Comercio (TLC) con Japón, país que acaba de acordar con Bogotá el inicio de negociaciones, y Corea del Sur, con el que Colombia tiene un acuerdo que se espera entre en vigor en 2013.
Para afrontar los desafíos del mercado, Muñoz recordó que el objetivo de Colombia es alcanzar sus niveles anteriores de producción después de cuatro años de caídas (en parte por tres años de intensas precipitaciones) y alcanzar 14 millones de sacos en el periodo 2014-2015.
Para el presidente de la FNC, las reformas en caficultura permitirán alcanzar esa cifra y lograr que para esas fechas el 100 por ciento de los campos del país estén renovados, algo que ya se ha hecho con 400.000 hectáreas en los últimos cuatro años.
La mejora de la sanidad vegetal también ha propiciado, según Muñoz, que los campos estén más tecnificados y sean más productivos gracias a las nuevas variedades desarrolladas para adaptarse al exceso o carencia de lluvias.
Fuente: lainformacion
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