Poseen características antioxidantes y antimicrobianas que previenen enfermedades cancerígenas y cardiovasculares
La Doctora Lida Fuentes, científica del Centro Regional de Estudios en Alimentos y Salud (CREAS) en Chile, a través de una investigación financiada por Innova-CORFO, pretende medir el posible impacto que pueden tener las bayas de peumo y arrayán en la industria del cuidado de la salud.
El proyecto, denominado “Evaluación de la capacidad antioxidante y potencial antimicrobiano de extracto de Peumo y Arrayán” se realizó en base a una anterior investigación donde se determinó la posible aplicación de estas especies en el área farmacéutica y agroindustrial. Para entregar más detalles al respecto, la investigadora conversó con PRA.
Fuentes, Doctora en Biología Celular y Molecular, comentó que diversos estudios han comprobado la riqueza de los frutos del peumo y del arrayán, sobre todo por sus características antioxidantes que previenen enfermedades cancerígenas o cardiovasculares, además de su uso profiláctico que previene infecciones urinarias.
De esta manera, la investigadora señala que “el estudio del proyecto CORFO nació de los resultados obtenidos de un proyecto CONAF, aún en ejecución, que está orientado a encontrar valor agregado a distintas especies nativas para promover su manejo sustentable. Elegimos estas especies en particular, dado su amplia distribución en el país, fácil multiplicación, su uso en la medicina mapuche y ambos tienen frutos comestibles”.
Y es que en la actualidad, y según Fuentes, aún existe mucho desconocimiento sobre las propiedades que poseen las plantas y árboles del bosque nativo chileno, por lo que mediante la investigación, se espera que el peumo y el arrayán tengan el mismo potencial de especies como el maqui y la murta -entre otras- las cuales han tenido gran desarrollo en la industria nutricosmética.
Con respecto a la parte económica, Fuentes destaca que en el mercado internacional, las industrias de bienestar y de productos amigables con el medio ambiente han ganado importancia durante los últimos años, de manera que Chile debería aprovechar la materia prima que posee para ser parte de este mercado.
“Mediante esta investigación nosotros quisimos evaluar la capacidad antioxidante y antimicrobianas de ambas especies y comparar estas características con especies comerciales como la frambuesa y arándano que se cultivan en nuestro país”, dijo.
“Existen diversos estudios que demuestran que las moléculas antioxidantes tienen grandes beneficios para la salud de los seres humanos. Estas moléculas pueden ser obtenidas mediante los alimentos, suplementos alimenticios y también hay cremas ricas en estas moléculas que retardan el envejecimiento de la piel. Por eso, encontrar nuevas fuentes con gran cantidad de estas moléculas es importante, sobre todo si son obtenidas de materias primas de nuestro país”.
“Los productos derivados de especies nativas son una excelente alternativa para ir con esta tendencia y entrar al mercado de la nutricosmética. Sin embargo, si nosotros vamos a una farmacias y pedimos suplementos alimenticios o cremas cosméticas, veremos que la mayoría tienen materias primas que se importan”, declaró y agregó que “si al país le interesa competir en este mercado, es muy importante evaluar nuevas fuentes y la flora nativa es una excelente oportunidad ya que nos permite ser más competitivos con productos propios. Por suerte ya hay productos de especies nativas que están teniendo un insipiente uso en este mercado, como lo son los suplementos a base de maqui y las cremas cosméticas a base de murta”.
Finalmente, destacó que lo más importante de este tipo de proyectos es el impacto social y económico ya que se enfocan en ayudar a los agricultores, aprovechando materia prima nacional y promoviendo el cuidado al medio ambiente.
“Creo que el mayor aporte de estos proyectos es el impacto social y ecológico, dado que la industria asociada al uso de los nativos favorece, principalmente, a los recolectores y microempresas. Además, el hecho de que las plantas nativas tengan un uso y la gente les dé un valor comercial no maderero, permite su mejor preservación y disminuye el que los bosques nativos sean reemplazados por plantaciones con especies foráneas. Esperamos que, en el futuro, estos proyectos promuevan la re-forestación y sean una nueva fuente de negocio para los agricultores”, señaló.
¡Necesitas ser un miembro de AGRO 2.0 para añadir comentarios!
Participar en AGRO 2.0