AGRO 2.0 Aumentan rendimientos en el cultivo de maíz con micronutrientes

La fuerte penetración de la frontera agrícola en la Provincia de San Luis llega con nuevas tecnologías. En campos de Paso de las Carretas y Cuatro Esquinas lograron aumentar hasta un 15 por ciento el rendimiento en cultivo de maíz con la incorporación de zinc en tratamiento de semilla y en aplicaciones foliares.
La positiva experiencia llevó a repetir el esquema en otro campo de Estancia Grande. Su asesor técnico, Ramiro Goncálvez, mostró a Suplemento El Campo el comportamiento del cultivo con aplicaciones similares a las probadas con productos del laboratorio Stoller, cuyo asesor técnico y comercial, Hernán Gómez, sigue de cerca éste y otros trabajos desarrollados dentro de San Luis.
El intenso y brillante verde de los maizales que domina el faldeo de las Sierras de San Luis en la zona de Estancia Grande, es síntoma evidente de que el cultivo recibió las dosis adecuadas y oportunas de zinc, explicaron los técnicos al caminar entre las hileras.
El zinc es considerado un elemento esencial para el normal crecimiento de las plantas, destacó Goncálvez: “Cuando el suministro de este nutriente no es adecuado, una o más funciones fisiológicas de las plantas se ven comprometidas y el crecimiento se afecta severamente”.
Las pruebas exitosas más próximas a la capital puntana se registraron durante la campaña 2011-2012. En un campo de Cuatro Esquinas, por ejemplo, de la firma Granos del Oeste, obtuvieron un 15 por ciento más de rendimiento con maíz con aplicaciones de zinc. El cultivo testigo dio 7.408 kilos por hectárea, mientras que el tratado con el producto trepó a 8.519 kilos, 1.111 más. Allí el 3 de diciembre de 2011 sembraron el híbrido Monsanto DK 670 MGRR2, a 52 centímetros entre surcos y con una densidad de 60.000 plantas por hectárea.
Algo parecido ocurrió con otro lote en Las Isletas, donde la firma La Laura sembró el 1º de diciembre de 2012 una soja de Nidera NA 4613, a 52 centímetros entre surcos y una densidad de 290.000 plantas por hectárea. El cuadro testigo rindió 641 kilos por hectárea y el tratado con zinc 887 kilos, 236 más.
Los productos comerciales disponibles que tienen zinc son promocionados porque suministran macro y micronutrientes de forma equilibrada, son rápidamente absorbidos por hojas y raíces, cuyo ritmo de crecimiento aumenta por estímulo de metabolismo. También tiene influencia en la transformación de azúcares y en la síntesis de proteínas. También aseguran que favorece la producción de semillas.
El maíz es considerado como una especie altamente afectada por la deficiencia de zinc, aclaró Goncálvez: “En nuestro país son reiterados los reportes donde ha evaluado la disponibilidad de zinc y la respuesta generada frente a diferentes formas de aplicación de este nutriente”.
La incorporación de zinc en maíz puede realizarse a través de la incorporación del nutriente en el suelo, por vía foliar o en tratamientos de semilla, explicó Gómez: “Estos dos últimos fueron las alternativas más eficientes porque prácticamente la totalidad del zinc aplicado es aprovechado por las plantas, incluso en pequeñas dosis”.
Para el especialista Goncálvez, la fertilización con zinc es considerada fundamental para el normal crecimiento y desarrollo de la planta y con ello obtener altos rendimientos.
La firma Stoller comercializa los diferentes productos aplicados en campos puntanos donde se realizaron mediciones y comparaciones.
Starter Plus es un fertilizante líquido que contienen 3 por ciento de zinc en forma quelatada, además de 10 por ciento de nitrógeno y magnesio, azufre, boro, manganeso y molibdeno.
Starter es otro fertilizante líquido compuesto por 5 por ciento de zinc quelatado, además de manganeso, cobre, boro y azufre. Starter Zinc es también un fertilizante líquido que contiene 7 por ciento de zinc quelatado y 3 por ciento de azufre.
Los técnicos mostraron registros de lo ocurrido con maíces durante la campaña pasada. En Cuatro Esquinas, a 20 kilómetros al este de San Luis. Allí sembraron el 31 de diciembre de 2011 el híbrido de Monsanto DK 670 MG RR2. El cultivo tratado con Starter Plus, más Stoller Zinc en aplicaciones foliares rindió 11,63 por ciento más que el testigo, es decir que de 8.899 kilos por hectárea de rendimiento saltó a 9.934 kilos.
Disponibilidad de zinc. Los técnicos que desarrollan experiencias en San Luis explicaron que el zinc disponible para las plantas es aquél que se encuentra en la solución del suelo o débilmente absorbido a sus partículas.
Sin embargo, hay ciertos factores que limitan esta disponibilidad, como suelos arenosos, predominantes en la Provincia de San Luis, que en general tienen bajas concentraciones de zinc.
También influyen las temperaturas bajas del suelo, que inciden en un menor desarrollo radicular y una menor actividad microbial en la descomposición de la materia orgánica.
Otra limitante son los suelos con altas concentraciones de fósforo disponible que insolubiliza el zinc en las superficies de las raíces, disminuye la absorción e inhibe no competitivamente la absorción de zinc. Suelos con altas concentraciones de fósforo de material originario o fertilización en la línea de siembra inmovilizan el zinc en el suelo, dejándolo no disponible para las plantas.
La disponibilidad de este nutriente para las plantas se ve limitado además por suelos con escasa humedad, con impedimentos mecánicos que restringen la exploración radicular para acceder a zonas con mayor disponibilidad de zinc.
También los suelos alcalinos, calcáreos o pesados que llevan la inmovilización del zinc en comparación de aquellos neutros o ligeramente ácidos.
Los suelos con bajo contenido de materia orgánica impiden la absorción del zinc a sus partículas y la formación de complejos orgánicos solubles de zinc.
Advierten además que las altas concentraciones de cobre en la solución del suelo pueden reducir la disponibilidad de zinc, y viceversa, debido a la competencia en las sitios de absorción en la raíz de la planta.
Las aplicaciones foliares de las marcas comerciales de Stoller tiene como finalidad complementar la alta demanda generada por el crecimiento de la planta y evitar la caída en el desarrollo radicular.