Recientes informes sobre la reducción del volumen en los arándanos argentinos entre las semanas 45 y 48 son el resultado de unas condiciones meteorológicas adversas.
Inés Peláez, del Comité Argentino de Arándanos, ha dicho: "Es el efecto del fenómeno el Niño, que causa que las precipitaciones sean mayores que de costumbre y se reduce así el número de días que es posible cosechar".
No obstante, el efecto general sobre las predicciones de la cosecha no ha sido muy dramático. Esta temporada se esperan recoger 14 000 toneladas, en contra de una predicción anterior de 15 300 toneladas.
La disminución de los volúmenes apenas a alterado el patrón natural de precios, como ha explicado Inés.
"Durante la semana 44, los precios van a empezar a bajar, y una vez se detienen, no vuelven a subir".
Fuente: freshplaza
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