AGRO 2.0 ARGENTINA: El trigo argentino se cae a pique

Estados Unidos desplazó este año al país como principal proveedor del cereal a Brasil. Otra consecuencia de la intervención de Guillermo Moreno

Desde que en el año 2007 la Secretaría de Comercio, encabezada por Guillermo Moreno, intervino el mercado del trigo, se cayó a pique la producción generando consecuencias nefastas para el sector: este año se obtuvo la peor cosecha en 100 años, se redujeron los cupos de exportación ahogando decenas de molinos y creció exponencialmente el precio de la harina y el pan.

Pero además, la política del Gobierno hizo que en 2013 Estados Unidos termine desplazando a la Argentina como principal proveedor de este cereal a Brasil, ya que el país del norte vendió a ese mercado 2,7 millones de toneladas, contra 2,5 millones de toneladas que colocó la producción nacional.

Los datos surgen de un relevamiento realizado por Leandro Pierbattisti, asesor de la Federación de Acopiadores, con cruzamiento de datos de exportaciones, hasta el 17 de octubre de 2013 (datos correspondientes a la cosecha 2012/2013).

Cabe recordar que Brasil es, junto con Indonesia, el segundo comprador de trigo del mundo después de Egipto. Este año lleva importados 5,24 millones de toneladas de trigo.

La diferencia de los Estados Unidos con la Argentina podría ser aún mayor en lo que resta de 2013. Según Pierbattisti, hacia fines de año los Estados Unidos podrían cerrar sus ventas con un total de 3 millones de toneladas. Estados Unidos es el principal exportador mundial del cereal. Sobre una proyección de 30 millones de toneladas para todo 2013, ya colocó en el mercado global el 70 por ciento.

La avanzada del trigo norteamericano en Brasil es aún más destacable si se tiene en cuenta que en 2012 sólo colocó allí 54.000 toneladas, cuando la Argentina había vendido 5,05 millones de toneladas. El Gobierno garantizó con sus políticas erradas que el país pierda terreno en uno de los rubros en los que supo ser líder mundial.

Pérdida de terreno constante

La Argentina fue perdiendo terreno en Brasil de manera constante. Según muestran las estadísticas, entre las campañas 2000/01 a 2006/07, en promedio la Argentina tuvo el 91% del mercado de trigo brasileño. Después pasó al 69% en promedio del período 2007/08 a 2011/12. "En 2012/13 la participación cayó al 36%", señaló el asesor de la Federación de Acopiadores, Leandro Pierbattisti.

Semejante derrumbe obedece a que la Argentina, en medio de una siembra y cosecha en baja por el intervencionismo del Gobierno, redujo el saldo exportable. A modo de ejemplo, de la última cosecha el Gobierno autorizó exportar 5 millones de toneladas. Pero al malograrse la cosecha y terminar con 8,2 millones de toneladas, un 43,4% inferior al ciclo anterior, decidió recortar el cupo total de exportación a 3 millones de toneladas.

Para los Estados Unidos, haber desplazado a la Argentina del podio en el mercado de Brasil tiene un sabor a revancha, porque hasta 1990 fue el proveedor histórico del vecino país.

Poco rendimiento en los cultivos del norte

Las lluvias que se registraron en el norte del país demoraron la recolección de trigo, fundamentalmente en áreas donde los rindes obtenidos se mostraban como magros y muy dispares.

De acuerdo a los datos provistos por el Ministerio de Agricultura, los primeros lotes de trigo trillados en Tucumán, Chaco y el norte de Santa Fe arrojaron "hasta ahora rendimientos que no superan los 1.000 kilos por hectárea".

Por esta razón, la buena performance de la Provincia de Buenos Aires no alcanzará para que la cosecha total pueda crecer significativamente, sobre todo porque se redujo el área sembrada, a causa de la intervención del Gobierno en el mercado.

Más allá de esto, los especialistas de la cartera agropecuaria, indicaron que "continúan las buenas condiciones en la principal zona productora, es decir en la mitad sur de la provincia de Buenos Aires, donde se esperan buenos resultados" al término del ciclo triguero.

La Bolsa de Cereales porteña aseguró que a la fecha se recolectó el 1,5 por ciento del área apta (es decir unos 3,62 millones de hectárea) hecho que exhibe un retraso interanual de 4,5 puntos porcentuales.

En números absolutos, la entidad porteña explicó que se cosecharon hasta el momento más de 50 mil hectáreas, con un rendimiento promedio en 820 kilos por hectárea.

En el caso de los lotes trigueros, Agricultura relevó que un 35 por ciento de los mismos se encuentran en macollaje, un 28 por ciento en espigazón y antesis, y un tres por ciento se e encuentra en estado de madurez.

En el caso de la cebada, el grueso de la producción nacional se encuentra en la mitad sur de la provincia de Buenos Aires, donde la humedad es satisfactoria y por ende el desarrollo de este cultivo no presenta inconvenientes.

Sin incentivos del Gobierno

Horacio Salaverri, titular de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) explicó: “No ha habido un aumento significativo en todo lo que ha sido la siembra de trigo para esta cosecha. No ha habido desde el Gobierno incentivos para una siembra mayor de trigo”. En ese mismo sentido, agregó: “la política de la Casa Rosada ha llevado a que el precio del trigo sea bajo para el productor, con una suba altísima para el consumidor”.

Piden reglas claras y previsibles

El economista de Confederaciones Rurales Argetinas (CRA), Juan Rey Kelly, destacó la necesidad de una serie de medidas que permitan al campo recuperar rentabilidad y aportar divisas, que en el país escasean: "Con reglas claras, previsibles y una menor presión impositiva, en 2014 podrían ingresar 5000 millones de dólares adicionales, y en 2015, 8000 millones de dólares adicionales originados en el campo". El especialista enumeró, entre otras medidas positivas, la fijación de precios en forma clara y transparente.

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