AGRO 2.0 Agro y cambio climático

La Agencia de Noticias de la Universidad Nacional emitió un comunicado el 26 de octubre, el “Sector agropecuario, gran responsable del efecto invernadero”. Su fuente es el IDEAM, quien “revela que este sector es el causante del 38 % de las emisiones totales de gases de efecto invernadero (en Colombia). Ante esto, la única salida es implementar prácticas agrícolas amigables con el ambiente”. Luego cita al inventario de gases de efecto invernadero (GEI), del IDEAM, que le atribuye a la ganadería 18,5 % y a la agricultura el 18,1 %, diciendo que “son los subsectores que más emiten gases”.

La UN no aclara que los datos son de 2000 a 2004, cuando los Estados Unidos produjeron el 14,67 % de los GEI del mundo, China el 10,22 % y Colombia el 0,37 %.

En ese mismo periodo en Colombia, el transporte produjo 12,1 % de los GEI; la industria de la energía, el 8,5 %; las manufacturas y la construcción, el 7,3 %; la emisión de CO2 del suelo, 4,1 %; la conversión de bosques y praderas, 9,2 %; la disposición de residuos sólidos, 5 %; y sumando el 18,5 % de la ganadería y el 18,1 % de la agricultura, el acumulado de los principales emisores de GEI es de 79,8 o/o. El 18,2 % restante se compone de muchos factores pequeños.

Según la UN, en Colombia “Dentro del sector (agro), el 93% de las emisiones de CH4 (metano) son producto de la fermentación entérica; 4% del arroz; y 3% del manejo del estiércol. Por eso...el sector agropecuario debe tomar medidas urgentes para reducir dichas emisiones”. La fermentación entérica es la digestión del pasto por el ganado, que transforma sus flatulencias y eructos en grandes cantidades de gas metano.

¿Qué puede hacer el sector agropecuario?

Según Martha Cecilia Cadena, del programa de agroclimatología del IDEAM, “el sector debe retomar muchas de las prácticas ancestrales de los indígenas y campesinos, que solían tener un desarrollo sostenible… y una producción que no originaba desechos, que no deforestaba y que no acababa con las fuentes de agua. La única forma de adaptarnos es teniendo estas buenas prácticas agrícolas”.

A primera vista, parece una recomendación regresiva, pero pensándola sin prejuicios, es la única solución. Una de las grandes industrias agropecuarias, la de la caña, es citada como buen ejemplo por la funcionaria porque riega de forma eficiente. También recomienda Cadena que los campesinos minifundistas, que son la mayoría, deberían tener asistencia técnica masiva, porque la de ahora es poca e intermitente.

En resumen, la redención de la ganadería está en la silvicultura, pero tiene que haber una política que incluya y financie a los miles de campesinos pequeños, condenados a las malas prácticas agrícolas y ganaderas por la falta de capacitación y financiación. Y no nos cansaremos de repetir en este espacio que no hay tecnificación valedera si no hay riego todo el año.

Por su parte, los grandes depredadores de la naturaleza de cualquier sector, sin el atenuante del atraso que ocasiona la pobreza, deberían ser sancionados ejemplarmente.

FUENTE: ElUniversalCtg